(ZENIT – Valencia). El ayuntamiento de Rotterdam ha propuesto implementar una ley por la cual, las madres que sean diagnosticadas clínicamente “incompetentes” para criar hijos, deberán emplear un método para evitar la concepción, como el uso de un DIU o someterse a un tratamiento de píldoras anticonceptivas. El responsable de bienestar de la juventud, Hugo de Jonge, ha hecho un llamamiento para que los jueces tengan la potestad de expedir órdenes judiciales para obligar a las madres que por problemas de adicción o psicológicos hayan demostrado incapacidad para la crianza, a utilizar un método de anticoncepción. De Jonge ha defendido que esta medida tiene por objetivo “proteger a los niños que nacerían en familias en las que a todos se les revuelve el estómago al pensar que van a tener un hijo”. “No nacer es otra forma de protección infantil”, ha concluido.
El programa del Ayuntamiento ha sido asignado a 400 mujeres y para llevarlo a cabo, precisarán de entre 10 y 20 órdenes judiciales de contracepción al día. Por el momento, el Consejo Holandés ha puesto en marcha un programa de anticoncepción voluntaria destinado a 160 mujeres en situación de riesgo para afrontar la maternidad. La mayoría de los partidos políticos han rechazado esta medida, entre ellos los democristianos y el actual partido gobernante de los Países Bajos, VVD. “El gobierno no puede decidir quién puede o no puede tener un hijo. La puerta a este tipo de medidas debería estar cerrada”, ha declarado la formación de centroderecha.
Como en el documento se indica, la mayoría de los partidos políticos han rechazado esta propuesta, pues atenta gravemente contra la libertad de las personas, e incluso nos parece presenta dificultades técnicas objetivas en cuanto a la necesidad de determinar qué mujeres o no son incompetentes y qué procedimiento se arbitran para ello.
Observatorio de Bioética – Universidad Católica de Valencia
Bioética y defensa de la familia
(Foto: Foro de la Familia)