“La piedad popular es parte del ADN del pueblo peruano”
(ZENIT).- Mons. Juan Luis Cipriani, Cardenal peruano y Arzobispo de Lima, aseguró en Roma el martes, 5 de diciembre de 2017, en un desayuno de trabajo con periodistas, que el Santo Padre “tiene muy metido en el alma una idea concreta: que Perú es tierra de muchos y grandes santos”, informa Sergio Mora en ‘Latinos en Italia’.
Señaló también que encontró al Santo Padre en muy buen estado de salud y que le confió: “Estoy soñando del deseo de estar ya en Perú”. Añadió que el Papa quedó muy contento con el viaje que había recién realizado a Myanmar y Bangladesh, y que además “envió una bendición al pueblo peruano”.
El Papa Francisco realizará su viaje apostólico a Chile del 15 al 18 de enero de 2018, visitando Santiago, Arica y Temuco. Y del 18 al 22 del mismo mes estará en Perú, en las ciudades de Lima, Trujillo y Puerto Maldonado.
El Cardenal limeño aseguró datos en la mano, que “Perú es un país profundamente cristiano”, que “defiende la vida” y que “espera al Papa con mucha alegría”.
“La piedad popular es parte del ADN del pueblo peruano y el pueblo piensa en cristiano” aseguró el purpurado, quien comentó que en su país “un curita es un curita, te piden una bendición a cada dos metros”. Indicó que contra la familia existe “un montaje ideológico de una minoría” porque “la gente apoya a la Iglesia y tienen confianza en Dios”. Y si alguien tiene dudas lo invitó: “¿Por qué no hacemos una encuesta y le preguntamos al pueblo?”.
Defensa por la vida
Señaló también que existe “una defensa por la vida muy clara y muy neta”. Y que “con la exhortación postsinodal del Papa, ‘Amoris Laetitia’ no ha habido dificultad”, invitando “a leerla bien, porque algunos quieren leerla parcialmente y generar polémica”.
Sobre el tema de corrupción indicó que “ha habido una explosión de denuncias”, debido a que empresas multinacionales han encontrado la estrategia de corromper a los gobiernos para conseguir las licitaciones de grandes obras” lo que “ha hecho un grave daño”.
En ese sentido el Cardenal señaló que actualmente hay “dos presidentes y medio presos”, refiriéndose a Alberto Fujimori, a Ollanta Humala con prisión preventiva y a Alejandro Toledo para quien se pidió la extradición de EE.UU.
“La corrupción golpea mucho a la gente pobre, esta es la tragedia. Quita la confianza a la inversión y empobrece a todos. En un camino positivo y creciendo razonablemente pero la corrupción ha creado pesimismo”, dijo.
Interrogado sobre si el Santo Padre iba a hablarle al presidente, Pedro Pablo Kuczynsky, del tema de la corrupción, el Cardenal señaló que el Papa es muy claro en sus mensajes, pero que si a uno alguien lo invita, no se llega acusándolo de corrupto. Puntalizando además que el presidente Kuczynsky no ha sido involucrado en casos de corrupción sino rozado indirectamente.
Además, Mons. Cipriani dijo: “Es un viaje pastoral y no va a dar indicaciones políticas”. Añadió que “hablará seguramente de la corrupción pero en no en clave política sino en ámbito moral”.
Sobre la piedad popular señaló que “es una clave de la nueva evangelización, el papa es muy partidario de esa piedad popular que es un regalo de Dios”. Señaló también que se quiere “una iglesia más unida para que sea más creíble, más visible en su laicado” y que ha llegado “la hora de sacudir un poco el clericalismo, que los laicos se asuman sus responsabilidades”.
Sobre las reformas que el Santo Padre está realizando en la Iglesia el cardenal Cipriani señaló que “pone toda su buena voluntad” si bien reconoció que “lamentablemente a veces la gente le falla”. Añadió que el Pontífice “quiere una mayor transparencia en la gestión económica. Son siglos de una cultura económica diversa y se trata de acercarlos a los niveles modernos. Transparencia y también de una mayor austeridad en las finanzas vaticanas. Permanentemente recibimos estas indicaciones”, dijo.
Francisco quiere, aseguró, “una iglesia que está más despierta, apostólica, lanzada a la búsqueda. No a quienes comodamente desde el balcón critican al Papa”.
Interrogado sobre Venezuela, el Cardenal Cipriani indicó que “la Santa Sede ha echo un esfuerzo enorme que no ha sido respetado”, lamentó que “la comunidad internacional está viendo con pasividad con lo que está sucediendo” y reiteró su “solidaridad con obispos y hermanos”. Y concluyó: “No veo un clima adecuado. Para dialogar hay que intentar decir al menos la verdad”.
Imagen: Mons. Cipriani informa a los periodistas en Roma
(© Sergio Mora)