Casi al mismo tiempo que fue descubierta la identidad de Producciones Gusano, una señora de tal apellido que tiene por cometido en las redes sociales glosar el físico de Sánchez y se esconde tras el nick de Handsome, cobrando para ello una buena cantidad de dinero por cuenta del Grupo Parlamentario Socialista, nos llega tabulado la lista de los «trabajadores» (sic) mejor pagados de RTVE, que seguro no están todos los que son, ni son todos los que están.
Una y otros abrevan del erario público, cuyo dinero debería ser sagrado para aquellos que tienen la responsabilidad de vigilarlo y administrarlo. Tengo para mí, en base a informaciones fiables, que cuando se produzca la caída de Sánchez, que no puede tardar a tenor de las circunstancias, una de las primeras obligaciones del nuevo presidente y su Ejecutivo será abrir una auditoría en toda regla en RTVE a través de la cual, al menos, los contribuyentes tengan cabal idea de a quién, quiénes y cómo han ido sus impuestos.
Se ha puesto de actualidad el asunto a propósito de la morterada de euros que recibe (a través de una productora digna de toda sospecha política) Silvia Intxaurrondo, que antes abrevó en la Telemadrid teóricamente gobernada por el Partido Popular de Madrid. Sus 537.514 euros, más los 25.000 por pieza de El mejor de la Historia –apartado del prime time por baja audiencia– no es algo que cobre ningún ciudadano desprotegido a los que dicen defender. ¿Qué pensará una dependienta que vota izquierda que gana 13.800 euros anuales? ¿O un obrero de la construcción que percibe 18.000 euros por doce meses de durísimo trabajo?
Las productoras que sirven a RTVE están en el punto de mira. Siempre son los mismos nombres e idénticos apellidos. Contreras (José Miguel), un artista de la pista; su coleguilla Andrés Varela (The Pool) un señorito de bombín (hiperbólico) arrimado a la ascua más candente. No sé si hablar de Lavinia Audiovisual y sus concomitancias y derivaciones políticas…
Si fuera cierto, según informaciones que circulan por RTVE, que Javier Ruiz percibe 78.000 euros; Lourdes Maldonado, 100.000; Jordi González, 113.600; Samanta Villar, 125.000; Josep Cuní, 280.000; Gema Nierga, 323.425; Anne Igartiburu, 443.375; y, finalmente, la susodicha Intxaurrondo, 537.514, será cuestión de o bien apuntarnos todos a partidos de izquierda o, quizá, optar por la insumisión fiscal.
De las ganancias de Contreras, Varela y otros compañeros, mártires de la autodenominada progresía, mejor lo dejamos como está. ¡Venían a defender a los pobres y a dar ejemplo…!
GRACIANO PALOMO
Publicado en OKdiario el 17.3.2024.