Habrán sido informados ustedes que el Gobierno ha dicho que no volverá a facilitar cifras oficiales del desempleo hasta que no pase el 28M. ¡Qué raro! Se lo ponen a tiro a los maliciosos antipatriotas, que diría Sánchez y repite el orondo Escrivá.
España está a la cabeza del paro de entre todos los países de la Unión Europea pese a todas las trompas de la heroína ferrolana con los «fijos discontinuos inactivos». Diez puntos por encima, por ejemplo, de Alemania donde el número de desempleados es prácticamente inexistente. No presuman tanto porque son incapaces de decirle a la autoridad supranacional (UE) por dónde piensan ajustar el bisturí. Son incapaces porque no saben. Punto. Incompetentes y sectarios porque olvidan algo básico: el empleo lo crean los empleadores a los que este Gobierno combate con fruición. Estos cuatro años sí han servido para algo. Para conocer que aquéllos que venían a resolver los problemas de los más necesitados (no hay peor maleficio que estar contra la voluntad mano sobre mano) han demostrado que sólo eran tigres de papel. Ni fórmulas mágicas, como prometieron, ni ejemplaridad personal. A disfrutar de lo caído que son dos días.
No queda ahí una mala semana europea para el Gobierno. Con toda su jeta de cemento armado, Sánchez ha reaccionado al varapalo de la UE en la cuestión de las rebajas de penas por malversación (corrupción) que él perpetró hace bien poco en España para favorecer a los independentistas y a las gentes del PSOE corrompidos hasta los tuétanos. Por cierto, ¿existió el Tito Berni? Pues bien, la carallada sanchista ha servido de pretexto a los mandatarios europeos para poner en práctica una armonización de penas en todos los países que conforman el exclusivo club de la Unión Europea. Todo ello pensando en Sánchez, próximo presidente de turno y a tiempo parcial, que no vuelva a vendernos la moto averiada.
¡Qué se vaya preparando el Falcon! ¡Menudo tute la espera!
GRACIANO PALOMO
Publicado en OKdiario.
Domingo 7 de mayo 2023.