Garrido visita la sede de la iniciativa, promovida por la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor
En 2015, 464 jóvenes participaron en las acciones formativas y 159 de ellos firmaron un contrato de trabajo
Cerca de 200 empresas colaboran para facilitar a los menores su inserción en el mercado laboral
El Programa de Apoyo a la Inserción Sociolaboral (PAIS) promovido por la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor (ARRMI) de la Comunidad de Madrid ha cerrado 2015 con la participación de 464 menores y jóvenes con medidas judiciales, a los que se les ha dotado de las herramientas necesarias para poder integrarse en el mercado laboral y hacer la transición a una vida adulta autónoma con garantías de éxito.
El consejero de Presidencia, Justicia y Portavoz del Gobierno regional, Ángel Garrido, ha visitado la sede del programa PAIS, donde ha tenido oportunidad de conocer sus principales iniciativas, que el año pasado han culminado con la firma de 159 contratos de trabajo por parte de jóvenes que participan en el proyecto.
Garrido, que ha estado acompañado por la directora gerente de ARRMI, Regina Otaola, ha subrayado el papel del trabajo como un elemento clave en la inserción social de estos menores. “Partimos de la premisa de que el pasado no debe condicionar el futuro de unos jóvenes que, con apoyo y motivación, pueden aprovechar esta segunda oportunidad que se les brinda”, ha añadido.
Evitar la reincidencia
El Programa PAIS nace en 2008 dentro de las actuaciones promovidas por ARRMI para facilitar la inserción sociolaboral de los menores a los que atiende. Un elemento fundamental para consumar su plena reinserción en la sociedad y crear factores de protección que eviten el riesgo de reincidencia en el delito.
En total, el año pasado se llevaron a cabo 1.677 actuaciones orientadas a la contratación laboral de estos menores. De ellas, 608 estuvieron relacionadas con la formación: 325 formaciones prelaborales (aprendizaje de las competencias básicas para propiciar la entrada en el mercado laboral) y 283 formaciones ocupacionales desarrolladas (aprendizaje de competencias relacionadas con una profesión concreta), tanto a través de cursos internos o de cursos conveniados con empresas colaboradoras como de formaciones que combinan las actividades presenciales con el e-learning.
A las actividades de formación también hay que añadir entrevistas y acompañamientos (más de 1.000) en el entorno laboral a los menores participantes en el programa. Todo ello se ha traducido en que 224 jóvenes han participado en prácticas en empresa y en la firma de 159 contratos de trabajo, el 78% de ellos estables.
La hostelería, principal salida laboral
El principal sector en el que se realizan las prácticas y las contrataciones (58,5% del total) es en el de la hostelería, con perfiles tanto de cocineros como de camareros de barra y sala. Se trata de un sector con alta demanda, lo que facilita las posibilidades de acceso al mercado laboral; que permite una rápida evolución en la capacitación profesional de los jóvenes; y que tiene un carácter dinámico, activo y en expansión.
Logística y almacén (18%), oficios (12,5%), comercio y alimentación (4,5%) y servicios (4,5%) son los otros sectores en los que los menores han encontrado más posibilidades de contratación.
El programa PAIS, que cuenta con un equipo de seis profesionales (incluidos psicólogos y técnicos de inserción laboral), mantiene contactos y colaboración con cerca de 200 empresas para poder llevar a cabo sus actuaciones. De ellas, 85 han comenzado a participar con el proyecto el año pasado.
Los menores y jóvenes que participan en el programa tienen al menos 16 años, cumplen medidas judiciales en régimen abierto o semiabierto y se considera que la inserción sociolaboral es la salida más adecuada a su situación, bien porque no presentan una buena evolución académica en sus estudios o bien porque se entiende que es la vía más motivadora y adecuada a sus capacidades.
El perfil tipo es el de un varón (90,5% de los casos), de nacionalidad española (60%), de 18 años o más (55%) y al que han impuesto medidas judiciales en medio abierto (70,7%).
En 2015, la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor atendió a 2.806 menores y jóvenes, en ejecución de 3.429 medidas judiciales, el 21,3% de ellas de internamiento. La tasa de reinserción lograda es del 90%.