Cerca de 300 escolares de 1º y 2º de Primaria de la región participan en este proyecto pionero.
Lo lidera el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados IMDEA Alimentación de la Comunidad de Madrid.
Se evalúa si la detección precoz y la adopción de medidas pueden prevenir el desarrollo de la obesidad.
Cerca de 300 estudiantes de 1º y 2º de Primaria (6-8 años) de seis centros educativos de la Comunidad de Madrid participan en un estudio para identificar la propensión genética a la obesidad del Instituto Madrileño de Estudios Avanzados IMDEA Alimentación, con el fin de evaluar si la detección precoz de esta enfermedad y la adopción de una serie de medidas pueden prevenir su desarrollo.
La primera fase del estudio, que finalizará en 2021, cuando estos alumnos alcancen la edad comprendida entre los 10 y los 11 años, consiste en la recogida de datos con las mediciones iniciales de talla, peso y porcentaje de grasa en el cuerpo, así como una muestra que determina el perfil genético. Los alumnos son divididos en dos grupos, uno de control y otro de seguimiento, y a este último se les aplica una serie de acciones de salud para prevenir la obesidad y fomentar un estilo de vida saludable. Las mediciones se vuelven a realizar a los dos grupos cada año para comprobar la efectividad de las medidas adoptadas.
El consejero de Educación, Juventud y Deporte, Rafael van Grieken, ha visitado la sede del IMDEA Alimentación para conocer el desarrollo del estudio, que comenzó el pasado mes de marzo. El propio consejero se ha sometido al programa del chip “Forhealth”, que permite conocer el perfil personal en cuanto a la tendencia al desarrollo de las enfermedades crónicas más relacionadas con la alimentación y diseñar pautas dietéticas precisas para su prevención.
Gracias a los ensayos clínicos realizados en un total de 1.700 voluntarios, se han podido obtener chips, o agrupaciones genéticas validadas que, de forma rápida y no muy costosa, permiten clasificar individualmente a las personas y diseñar para ellas productos alimentarios o dietas, personalizados y efectivos para alcanzar un determinado objetivo de mejora de la salud.
La obesidad infantil es un problema de salud pública, como demuestra que en España, y de acuerdo al estudio ALADINO (Estudio de Vigilancia del Crecimiento, Alimentación, Actividad Física, Desarrollo Infantil y Obesidad en España, 2015), el 41,3% de los escolares entre 6 y 9 años padecen obesidad o sobrepeso.
Centro puntero de investigación
El centro que está llevando a cabo el estudio pertenece a la red de Institutos IMDEA creada por la Comunidad de Madrid con el objetivo de fomentar las actividades de I+D+i y su transferencia a la sociedad. El Instituto IMDEA Alimentación cuenta en la actualidad con cinco Programas de I+D: Nutrición de Precisión y Obesidad, Nutrición de Precisión y Cáncer, Nutrición de Precisión y salud Cardiometabólica, Nutrición de Precisión y Envejecimiento y Productos Alimentarios para la Nutrición de Precisión.
Otros proyectos que ha realizado IMDEA Alimentación, y que están comenzando a ser aplicados, son un chip para la mejora del rendimiento deportivo a través de la alimentación y otro para el mantenimiento del bienestar corporal en el envejecimiento. En el ámbito clínico, el Instituto colabora con los principales hospitales de Madrid en el desarrollo de terapias nutricionales, basadas en la genética, para enfermos de varios tipos de cáncer, campo en el que la nutrición personalizada puede hacer importantes aportaciones a corto plazo.
En este año 2017, el presupuesto de IMDEA Alimentación ha sido de 4,2 millones de euros y cuenta con una plantilla de 49 investigadores de alto potencial, provenientes de diferentes países. En cuanto a las publicaciones realizadas, desde el año 2008 y hasta el pasado 30 de junio, se habían realizado un total de 452.