A través de unidades móviles de Cruz Roja que se desplazan a las zonas en las que se realizan las pruebas.
El objetivo es facilitar apoyo y recursos a las personas más vulnerables para que puedan pasar la cuarentena.
El Gobierno regional ha puesto en marcha un hotel con 120 plazas para la residencia temporal de personas sin recursos.
15 de octubre de 2020.- La Comunidad de Madrid continúa ofreciendo atención social y recursos a las personas más vulnerables que resultan positivas en las campaña de cribado y realización de test de antígenos que se están llevando a cabo en las zonas básicas de salud de la región que presentan una mayor incidencia acumulada de casos por COVID-19.
El Gobierno madrileño, en colaboración con Cruz Roja, ha habilitado cinco unidades móviles compuestas por un trabajador social y un promotor de salud voluntario que se desplazan a los puntos de cribado para ofrecer asistencia social y recursos de inclusión a las personas vulnerables que den positivo en los test de antígenos. La Consejería de Sanidad se encarga de costear ambas actuaciones.
El objetivo de este refuerzo de atención social es que ninguna persona deje de acudir a la cita médica por temor a que el resultado pueda ocasionarle un problema en caso de tener que guardar la cuarentena. Este servicio ofrece información sobre la manera correcta de cumplir con el aislamiento, la valoración de las posibles necesidades sociales a través de una entrevista, la derivación a los servicios sociales municipales de los casos positivos que puedan tener un problema de ingresos derivado del aislamiento o la tramitación de un alojamiento alternativo para cumplir el mismo.
Precisamente para cubrir estas necesidades de alojamiento temporal, el Ejecutivo regional puso en marcha el pasado mes de septiembre un hotel en Las Tablas para que las personas sin hogar y familias en situación de exclusión residencial con sintomatología leve de COVID-19 o asintomáticos puedan pasar allí la cuarentena.
El centro, gestionado por personal especializado de Cruz Roja Comunidad de Madrid, cuenta con 120 plazas -18 de ellas acondicionadas especialmente para personas con discapacidad- y ofrece a los residentes la cobertura de sus necesidades básicas, además de seguimiento de su estado de salud (derivando al sistema público sanitario en caso de requerir una atención especializada), atención social, así como apoyo de acompañamiento y gestión del tiempo libre.