En la Universidad de Sofía.
(ZENIT).- Al final de la visita a la Universidad de Sofía, el presidente de la universidad y el presidente de la Asociación de Estudiantes Católicos han entregado al Papa Francisco una escultura que “originalmente” representaba a Kannon, diosa budista de la misericordia, y que “como se parece a una estatua de la Virgen María, los cristianos de Nagasaki durante la persecución, la utilizaban para rezar sin ser descubiertos”, ha detallado un representante de la universidad en español.
El 26 de noviembre de 2019, último día del Santo Padre en Japón, el Pontífice visitó la Universidad de Sofía, de los jesuitas, y pronunció un discurso frente a toda la comunidad educativa.
La escultura
“Esta estatua que le queremos regalar es originalmente la escultura de la diosa Kannon, que es la diosa budista de la misericordia”, ha aclarado el sacerdote argentino.
“Como se parece a una estatua de la Virgen María, los cristianos de Nagasaki, durante la persecución, la utilizaban para rezar sin ser descubiertos”, ha leído.
“Una particularidad de dicha figura es que está ennegrecida por el humo de las velas o probablemente el incienso que los cristianos le ofrecían cuando rezaban”, ha indicado. “Otra particularidad que tiene es que tiene a un niño en sus brazos, cosa no demasiado común en este tipo de esculturas, y que la hace todavía parecerse a una escultura de la Virgen con el Niño”.
Misionero en Japón
La talla proviene “probablemente del sur de China, de allí pasó a Japón y cuando el cristianismo fue prohibido quedó en manos los cristianos de Nagasaki”, ha matizado el sacerdote.
“Se la queremos regalar porque sabemos que cuando usted era más joven se ofreció a venir como misionero a Japón y para que, uniendo su corazón al de los mártires, no se olvide de rezar por todos nosotros”, expresó el mencionado jesuita.
Regalo del Papa a la Universidad
El Pontífice, por su parte, ofreció como regalo a la Universidad de Sofía una representación de la Virgen en plata pura, realizada en 1989 con la técnica de fundición a la cera perdida, indicó la Oficina de Prensa de la Santa Sede en un comunicado.
Es un bajorrelieve del maestro Marino Mandolesi, directamente inspirado en la famosa pintura de la Inmaculada Concepción de María realizada por Escipión Pulzone en 1582 para la capilla del mismo nombre en la ciudad de Gaeta, Italia.
LARISSA I. LÓPEZ
Imagen de portada:
Regalo de la Universidad de Sofía
(Foto: © Vatican Media)