El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y el alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá, junto a otros regidores de la zona, han inaugurado la nueva M-509, convertida en autovía tras la duplicación de un tramo de 5,1 kilómetros que une Majadahonda, Villanueva del Pardillo y la M-50 y beneficia a unos 100.000 usuarios.
La actuación ha tenido una inversión de 26 millones de euros y supone la mejora de la comunicación entre el noroeste de la región con Madrid y Ávila además de la seguridad vial y la fluidez del tránsito de los más de 33.000 vehículos que utilizan cada día esta vía -casi 12 millones anuales.
Los vecinos ya tienen a su disposición una carretera de dos calzadas separadas, una para cada sentido de circulación, con carriles de 3,5 metros de anchura. Las obras han incluido otros trabajos como la construcción de tres enlaces, dos de ellos para facilitar el acceso a las urbanizaciones de Santa María, Natura, Las Vegas y Villafranca del Castillo y otro para mejorar la conexión con la M-851.
Los nuevos accesos han implicado la eliminación de tres rotondas que generaban problemas de tráfico y embotellamientos en horas punta que se han sustituido por enlaces más seguros.
El proyecto ha incluido la construcción de dos viaductos, tres pasos superiores en los enlaces a las urbanizaciones y otros tres pasos inferiores y una pasarela peatonal metálica para el paso a la urbanización Entreálamos. Se ha mejorado el drenaje y la señalización de toda la calzada y se han instalado barreras de protección para motoristas.
Esta actuación, junto a la construcción del tercer carril de la M-503, que estará terminado en las próximas semanas, han sido destacadas por el alcalde como importantes