Los prelados en un pronunciamiento expresan su preocupación por la “poca respuesta que se ha tenido por parte de las autoridades en torno a los actos de violencia a nivel nacional”, hacen un llamado a las autoridades a “reconsiderar y, si es necesario, cambiar las estrategias de seguridad en el país, porque una cosa es clara: NO están dando los resultados esperados».
La Conferencia Episcopal de Honduras (C.E.H.) se ha pronunciado fuertemente este lunes 26 de junio 2023, en contra de la ola de violencia en la que está envuelto todo el pueblo hondureño y que ha dejado un saldo de decenas de fallecidos.
Las estrategias de seguridad en el país, “NO están dando los resultados esperados” se lee en el comunicado. Los prelados expresaron su preocupación por la poca atención y respuesta por parte del gobierno para responder a los actos de violencia a nivel nacional, que ha dejado un saldo de “tantos muertos, no se trata únicamente de cifras: son vidas humanas, y muchas de ellas son niños de muy corta edad”, por tanto, la Conferencia Episcopal pide se reconsidere un cambio de estrategias.
Según Wola, organización líder en investigación e incidencia que promueve los derechos humanos en las Américas, afirma que Honduras, El Salvador y Guatemala están aplicando gobiernos de excepción para lograr tener bajo control la violencia en esos países. Sin embargo, ese tipo de gobernabilidad limita las garantías constitucionales. El gobierno de Honduras, como respuesta al acto de violencia del pasado martes, ha enviado a las fuerzas militares para tener bajo control las cárceles, como política de seguridad.
Violencia consecuencia de años de injusticia
Con amargura, los obispos confirman que esta espiral de violencia es el resultado de años de injusticia, corrupción sistemática y de indiferencia con la que se han visto las raíces del problema. “La violencia recrudece la pobreza extrema y anula las esperanzas de encontrarle una solución duradera. Es una realidad que nos afecta a todos; por ello, nadie puede quedarse indiferente”, se lee en el texto.
Cercanía hacia familiares de víctimas
En el documento la Conferencia Episcopal como un gesto de solidaridad hacia las víctimas de esta ola de violencia descontrolada, asegura su cercanía fraterna, sus oraciones y hacen suyo el “el profundo dolor que viven tantas familias a causa de la pérdida de sus seres queridos, así como de aquellos que se sienten amenazados”.
De la misma manera, según el documento, se recuerda a las autoridades competentes que “cada familia y cada ciudadano necesitan y, más aún, tienen derecho a vivir en paz, asumiendo los propios deberes y compromisos en la sociedad, contribuyendo así al bienestar y progreso del país, en un clima de verdadero estado de derecho, sustentado en la procura del Bien Común. Hoy más que nunca necesitamos estar unidos”, se lee.
No responder al mal con actos de violencia
También otro de los párrafos de la misiva expresa que “’no se resistan al mal’, nos decía el Señor; no respondan al mal con más mal (Cf. Mt 5, 39). Como pastores de la Iglesia, que sentimos y sufrimos el dolor y la angustia, el miedo y la frustración de nuestro rebaño, rogamos a todos, que no nos cansemos de hacer el bien y mantengamos viva la esperanza cristiana”.
Por último, los obispos recordaron las palabras que el Papa Francisco dijo por este país el domingo en el Ángelus, que los exhortó a dirigir su mirada a la Santísima Virgen de Suyapa, Madre de Honduras, suplicándole que ayude a los corazones a abrirse a la reconciliación y dar lugar a la convivencia fraterna, en todos los espacios de la vida social, incluso dentro de las cárceles”. Al respecto, los obispos piden que el pueblo de Dios se una en la oración “sin desfallecer al Dios de la vida”.
VATICAN NEWS
Imagen: Miembros de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) revisan y cachean
a reclusos de la Penitenciaría Nacional «Francisco Morazán» en Tamara.
(Foto de Orlando SIERRA / AFP)