El Padre Sima’an Jaraisi, vicepárroco melquita de Nazaret y capellán de los Scouts católicos en Israel participa en Tonalestate 2024, el evento organizado por la Obra de Nazaret que se ha inaugurado ayer cerca de Reggio Emilia: «Muchos musulmanes, cristianos, drusos, judíos apoyan la paz y están en contra de este odio».
Ciudad del Vaticano, 8 de agosto 2024.- Cuando los tiempos cambian, ¿cambia la humanidad con ellos? Una pregunta importante, cuyas respuestas, a esta como a otras, se buscarán durante la Universidad Internacional de Verano Tonalestate, edición 2024 desde hoy hasta el 9 de agosto en curso en la provincia de Reggio Emilia, con el tema principal «Le temps vaincu – El tiempo ha pasado». Un evento nacido en 2000 por iniciativa de Giovanni Riva, fundador de la Compagnia dell’Opera di Nazareth, que se ha inaugurado hoy con una mesa redonda titulada «¿Tempora mutantur, et nos mutamur in illis?”
Oriente Medio, cómo vivir juntos
Vivimos un tiempo en el que las guerras, sean grandes o pequeñas, hacen del mundo un lugar en el que el hambre y la miseria comparten su espacio con riquezas desorbitadas, explican los organizadores. Vivimos un tiempo de «soledad negativa y falta de socorro», un tiempo «dominado por la globalización del mal», en el que la cuestión fundamental es cómo recuperar «una esperanza viva, clara y alegre». Este año, es la esperanza la que anima el evento, Tonalestate se caracterizará por una gran intensidad y el habitual e importante encuentro entre estudiantes, adultos, profesores, artistas y científicos llamados a una reflexión y profundización que pueden hacer de nuevo del evento una escuela de humanidad frente a los desafíos del mundo. Y habrá muchos de esos desafíos durante estos tres días de encuentros, entre ellos el del gran drama que se vive actualmente en Oriente Medio, cuyo relato, el 8 de agosto, será confiado a Sima’an Jaraisi, vicepárroco melquita en Nazaret y capellán de los scouts católicos en Israel, que hablará sobre el tema «Podemos vivir juntos».
Se ha perdido la dignidad y el carácter sagrado de la vida
En Oriente Medio hoy en día, explica el sacerdote, se ha perdido la «dignidad y el carácter sagrado de la vida humana», a pesar de que durante años ha habido momentos positivos y negativos, «pero era posible vivir juntos en paz y es posible vivir en paz». El padre Sima’an trae el ejemplo de algunos espacios de los scouts compartidos con árabes-cristianos, con judíos, con árabes-musulmanes, todos animados por un «alto respeto por la humanidad y por la dignidad de la persona». Hoy «el ambiente es oscuro y duro, pero no podemos reaccionar», prosigue con el dolor de quien no puede imaginar su futuro. «El odio crea odio. El amor crea amor. Nosotros apoyamos el amor», añade, «y somos muchos, musulmanes, cristianos, drusos, judíos, los que apoyamos la paz y estamos en contra de este odio».
Quien odia no es cristiano
Sima’an Jaraisi recuerda los tiempos pasados con los scouts, en los que todos nos llamábamos «hermano», pero que hoy se ven desbordados por el ambiente de guerra y violencia que no hace avanzar, que hace pensar que el tiempo se ha acabado. «Los cristianos -concluyó- no tenemos límites, ni fronteras con el perdón o con un mañana mejor, de lo contrario no seríamos cristianos. Como cristiano, sólo veo la paz, la dignidad del hombre y la vida. El que odia ya no es cristiano».
MICHELE RAVIART