Un “10” de `champions´ para los dos equipos madrileños que ofrecieron un enorme espectáculo en la final disputada en el estadio Da Luz de Lisboa. Fue un partido jugado con gran intensidad. Dos estilos distintos frente a frente, más físico el Atlético más técnico el Madrid, un árbitro que permitía el contacto y dos aficiones volcadas con sus colores. Se adelantó el Atlético a los 36 minutos del primer tiempo con un afortunado gol de Godín aprovechando un garrafal error de Casillas y Sergio Ramos de cabeza, ¡como no!, marcó el tanto del empate cuando habían transcurrido tres minutos de los cinco de descuento indicados por el holandés Bjorn Kuipers, árbitro del encuentro. La miel en los labios de los atléticos se torno hiel y se abría la incertidumbre de una prórroga de treinta minutos. Más enteros, los merengues manejaron los minutos suplementarios y con goles de Bale, Marcelo y Cristiano doblegaron a un digno rival que no se rindió nunca y que luchó incluso sacando fuerzas de donde ya no las tenía. Fue una exhibición futbolística que vieron millones de personas en el mundo a través de más de dos centenares de televisiones que transmitieron, en distintos idiomas, esta final entre dos equipos, Real y Atlético, con un mismo apellido: Madrid.
Nuestra enhorabuena a las aficiones cuyo comportamiento ha sido correcto antes, durante y después del partido. No se tienen noticias de incidentes destacables. Los madridistas eufóricos, los colchoneros tristes porque se esfumó la oportunidad de ganar su primera Copa de Europa en su segunda final disputada cuarenta años después de la que perdieron ante el Bayern Munchen. La historia, apuntaban algunos, se repite. Entonces un gol en los últimos instantes del partido forzó un desempate que se perdió y ahora igual, empate cuando el partido estaba prácticamente terminado y derrota en la prórroga.
Ha dicho el Cholo Simeone, entrenador del Atlético, que hay amargura por no haber podido cumplir el objetivo, pero cuando se da todo lo que se tiene hay que sentirse orgulloso y que ahora toca trabajar con vistas a la próxima temporada y empezar de nuevo.
En el Real Madrid, todos exultantes. Sergio Ramos, el hombre del partido, afirmaba que la victoria era el producto del trabajo colectivo y restaba importancia a su actuación personal. En este sentido coincidieron los jugadores y los técnicos del club de Concha Espina. Carlo Ancelotti estaba feliz, muy feliz, porque había llevado al Real Madrid a conquistar la “décima”, su gran obsesión y a nivel individual conseguir su tercera `Champion´ como entrenador, dos con el Milán y una con el Madrid, a las que hay que añadir sus dos Copas de Europa logradas como jugador. Carletto ha reconocido que se enfrentaron a un gran rival que les puso las cosas muy difíciles y recordó que le había dicho al presidente Florentino Pérez que en las vitrinas había un hueco para una nueva `orejona´. Así pues, los esfuerzos y desvelos de Florentino se ven recompensados con este nuevo título que puede ser el comienzo de un período hegemónico del Real Madrid en el continente. Bernd Schuster, afirmaba en Alemania en declaraciones hechas a Bild que el Madrid, actualmente con un gran armazón de equipo, podría reinar en los próximos años en Europa.
En Madrid el partido fue visto en pantallas gigantes por miles de aficionados que llenaron el Santiago Bernabeu y el Vicente Calderón. Al finalizar, los madridistas, en su mayoría se dirigieron a su plaza, la de la diosa Cibeles, para esperar a sus ídolos que tras regresar de Lisboa comparecieron a eso de las seis de la mañana para colocarle, como ya es tradicional, la bufanda del Real Madrid a la Cibeles. Ese honor le correspondió a Sergio Ramos, segundo capitán, a quien Iker Casillas le cedió ese privilegio al considerar que si Sergio no marca no hubiesen ido a la prórroga y el título estaría ahora en poder de sus vecinos del Manzanares.
Ha concluido la temporada, salvo para los que tienen que jugar con sus selecciones nacionales el mundial de Brasil, y se abren muchas interrogantes sobre la configuración de las plantillas. ¿Quiénes se van, quienes se quedan?. No tardaremos mucho en saberlo, pero habrán importantes novedades, más en el Barcelona y Atlético de Madrid que en el Real Madrid.
El comienzo de la próxima temporada tiene a nivel europeo un nuevo enfrentamiento entre dos equipos españoles: Sevilla, campeón de la Europa League, y Real Madrid de la champion, jugarán la supercopa continental. A nivel nacional, nuevamente Real (Copa del Rey) y Atlético (Liga) se verán las caras en la supercopa de España.
El acontecimiento vivido en el estadio Da Luz de Lisboa, seguido por millones de personas, evidencia que el fútbol continúa siendo el deporte de masas más importante, capaz de movilizar a las aficiones y generar emociones que van del amor al odio, de la risa al llanto, de la alegría a la decepción y que en cada temporada impulsa el nacimiento de una nueva ilusión por el triunfo de sus colores.