La Iglesia será facilitadora en la mesa de negociaciones
El diálogo entre el Gobierno de Colombia y el Ejercito de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo guerrilleo después de las FARC, se ha retomado este jueves 12 de enero en la capital de Ecuador, Quito, de acuerdo a lo decidido en octubre pasado.
Y mientas los obispos de Colombia en su web desean “que la paz del Señor brille en los corazones y que el 2017 sea un año de perdón y reconciliación”, el diálogo en los últimos meses no ha logrado dar nuevos pasos hacia adelante, debido a que el ELN no ha liberado al ex parlamentario Odín Sánchez, secuestrado hace nueve meses.
Si bien la liberación de Sánchez se consideraba indispensable para retomar el diálogo, el Gobierno aceptó proseguir las negociaciones, reiterando entretanto su pedido de dejar en libertad a los prisioneros. La Iglesia por su parte seguirá en la mesa de diálogo con una comisión dirigida por el arzobispo de Cali, Darío de Jesús Monsalve Mejía, que debe acompañar y facilitar los acuerdos.
Mons. Monsalve pidió pocos días atrás que el lugar de las negociaciones sea en Colombia, porque Ecuador está en plena campaña electoral para las presidenciales de febrero.
El arzobispo de Cali fue amenazado de muerte en diciembre pasado, a través de unos panfletos que decían “Muerte a las FARC, a Santos y a los clérigos comunistas”. El prelado consideró absurdo que mediar signifique ser parte, como interpretan algunos grupos radicales.
Imagen: El cura Camilo Torres, quien luego de renunciar a su trabajo como profesor y sacerdote,
se enroló en la guerrilla del ELN, donde murió en su primer combate
(Frame Youtube – Maddalena Robin)