El arzobispo de Madrid subraya el trabajo de la comunidad de Sant’Egidio para una verdadera cultura del encuentro
(ZENIT – Roma).- El cardenal Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, ordinario para los fieles de rito oriental de España, creado cardenal en 2016 por el papa Francisco, tomó posesión el sábado 25 de febrero de 2017 de la iglesia Santa María en Trastevere, una de las más antiguas de Roma y una joya arquitectónica.
El papa Francisco anunció el 9 de octubre de 2016 e su elevación a la púrpura cardenalicia y fue creado cardenal en la basílica de San Pedro en el consistorio del 19 de noviembre de ese año.
Todos los cardenales son titulares de un templo de la Ciudad Eterna, para subrayar su unión con el obispo de Roma, y al arzobispo de Madrid le fue dado este templo, con hermosos mosaicos medioevales, donde fue martirizado en el año 222 el papa san Calixto y su cuerpo arrojado al pozo de la iglesia que él había hecho construir.
El cardenal entró mientras el coro entonaba el salmo 61, ‘Descansa solo en Dios’ y en su homilía, el español agradeció al papa Francisco su nombramiento y recordó que esta iglesia está confiada a la comunidad de Sant’Egidio, con quien tiene estrecha relación y la cual “busca hacer verdad la cultura del encuentro, sirviendo siempre a los más pobres, en las circunstancias más adversas”.
El domingo 26 la Comunidad de San Egidio le mostrará al arzobispo de Madrid la basílica de San Bartolomé en la Isla Tiberina, iglesia en la que san Juan Pablo II quiso se dedique a la memoria ecuménica de los mártires del siglo XX y de los mártires contemporáneos. Después irá a vía del Fienaroli, donde está la escuela de italiano para los extranjeros y le explicarán el trabajo con los corredores humanitarios para hacer llegar a Italia, a familias de refugiados y una casa hogar para enfermos terminales.
Sergio Mora
Imagen: Abside en Santa María en Trastevere