2ª Comisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas
(ZENIT).- “Los líderes políticos, económicos y de la sociedad civil deben construir comunidades centradas en la persona y esforzarse por ayudar a todos a vivir una vida pacífica, decente y saludable”, dijo Mons. Auza.
El pasado 3 de octubre de 2017, el Arzobispo Bernardito Auza, Observador Permanente de la Santa Sede en las Naciones Unidas, ofreció unas palabras durante el Debate general de la 2ª Comisión, en la Asamblea General de las Naciones Unidas, sobre economía y cuestiones financieras.
En su declaración, monseñor Auza dijo que las instituciones políticas, culturales y sociales de todo el mundo se enfrentan a los efectos de un sistema financiero mundial centrado más en el dinero que en la persona humana, exacerbando situaciones de sin techo, desigualdad, polarización y politización.
“La ganancia económica y política a corto plazo no puede venir a expensas del desarrollo humano integral”, aseguró Mons. Aula, y animó a “los líderes políticos, económicos y de la sociedad civil” a “construir comunidades centradas en la persona y esforzarse por ayudar a todos a vivir una vida pacífica, decente y saludable”.
“Esto implica la integración, la inclusión social y la cooperación” en lugar de la competencia feroz y un enfoque holístico de las necesidades de la persona en línea con la solidaridad y la subsidiariedad, aclaró el Observador permanente de la Santa Sede.
Este es el camino, dijo, para la implementación exitosa de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la fundación de los Pactos Globales para los Refugiados y Migrantes.
Rosa Die Alcolea
Imagen: La sede de las Naciones Unidas en Nueva York
(Foto onu MX)