En Bolonia, Italia, se celebra una exposición con cincuenta dibujos de niños recogidos en el campo de refugiados de Dheisheh, cerca de Belén.
27 de abril 2024.- Janusz Korczak, médico y escritor judío polaco que acogió y protegió a jóvenes huérfanos durante el Holocausto, escribió «los niños no son soldados, no defienden su patria, sufren con ella». Korczak imploró a la humanidad que viera la guerra a través de los ojos inocentes de los niños cuyas vidas se ven abrumadas por la violencia. Las guerras atestiguan a diario que hay vidas jóvenes que sufren lesiones psicológicas como consecuencia del conflicto.
La exposición
Las víctimas muy jóvenes de los conflictos expresan a menudo sus traumas mediante dibujos, que entrelazan el dolor con el deseo de una vida feliz. En el Día Mundial del Dibujo, que se celebra cada 27 de abril, y cuyo tema para este 2024 es «¿Es amable?», cobran importancia las expresiones gráficas de los niños de Dheisheh, un campo de refugiados cerca de Belén, en Cisjordania, recogidas entre finales de diciembre pasado y principios de enero por Jeremy Lester, antiguo profesor de filosofía y ciencias políticas en Inglaterra.
Las imágenes forman la exposición organizada en el club cultural Nassau de Bolonia bajo el título «Liberar la imaginación: Palestina 2023-2048». La exposición, financiada por un grupo de amigos, pretende no sólo presentar la traumática experiencia de la guerra, sino también relatar las esperanzas de los niños en un futuro mejor de amor y paz.
Los dibujos
Las obras de los niños expuestas en Bolonia son el resultado de un programa de arte-terapia creado por Lester, que invitó a los jóvenes de Dheisheh a hacer dos dibujos, uno sobre su presente, el segundo sobre el futuro que desean. Uno de los dibujos que conmueve profundamente es el de un chico que con su cuerpo protege una flor de la bota de un soldado que quiere aplastarla, como si quisiera simbolizar la protección de la vida y el futuro.
Otra de las cincuenta obras de la exposición presenta a un niño pintando en color, sobre el escudo de un soldado, un sol sobre el contorno de una casa y un prado. Llaman la atención los amarillos, rojos y verdes que iluminan el dibujo, en su mayoría en blanco y negro.
Otra de las obras muestra dos manos que simbolizan un árbol tendidas hacia un sol chillón, amarillo y naranja, mientras un entrelazado de flores las rodea.
La norma de la gentileza
El título del Día Mundial del Diseño, «Is it kind?» («¿Es amable?»), pretende hacer hincapié en la integración de la gentileza en la práctica del diseño, es decir, un mundo en el que el diseño sea cortés, generoso y solidario. El diseño amable puede ser participativo, socialmente orientado y abierto; desde esta perspectiva, el autor podría considerarse un facilitador que crea espacios de entendimiento entre las personas, más allá de las diferencias de identidad.
JESSICA JEYAMARIDAS