Declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid en el IV Foro Económico Wake up! Spain, organizado por el diario digital El Español.
👉 Los tambores de guerra contra la prosperidad resuenan con fuerza: constantes mensajes contra el trabajo, los horarios, intromisión en las decisiones empresariales y los consejos de administración de las compañías, leyes sectarias que hacen aún más rígida la vida empresarial y la alejan de la competitividad con la que operan las empresas en otros países.
👉 Son medidas que no se han estudiado desde el rigor, sino con el sonotone electoral: Las Golden Visa, el impuesto de patrimonio, la amenaza de eliminar las bonificaciones en donaciones y sucesiones en España entera.
👉 Afortunadamente, no todas las comunidades autónomas vemos la vida de la misma manera. Desde luego, Madrid no lo hace. Somos la región al servicio de España, una región de vocación internacional, pero de fuerte pasión por sus ciudades y sus pueblos.
👉 Los anuncios electoralistas que solo pagan autónomos y empresas hacen que la industria, el comercio o el empleo no tengan ni de lejos la fortaleza que se podía esperar de nosotros. El sector privado está remando en ese sentido y echándose a las espaldas el sacrificio en soledad y solo con un sector privado pujante podremos sufragar los mejores servicios públicos, que los tenemos, pero es a los que nos debemos.
👉 Sin embargo, la política frentista y la obsesiva mirada al pasado, a los peores episodios de enfrentamiento entre españoles, el costosísimo nacionalismo junto a más impuestos, más rigidez, más normativa, doctrina intervencionista, machacona que busca el desincentivo y la subvención sistemática y la pérdida de libertad para el emprendimiento y los negocios están haciendo un daño incalculable a nuestra economía y nuestra prosperidad.
👉 Y a todo esto se suma la oportunidad perdida en los fondos europeos para empresas y administraciones, todas las últimas medidas anunciadas por el Gobierno, todas toditas, todas empujan a la empresa a perder las ganas: ganas de arriesgar, ganas de ser generosa, de crear empleos, de poner su patrimonio en juego.
👉 Todos son invitaciones con su dinero y su trabajo a pesar de ellas, sin pensar en ellas, castigando a la que tenga beneficios para que no pueda seguir creciendo, invirtiendo, persiguiendo a la que le vaya bien y señalándola como sospechosa. Y con estas medidas intervencionistas, que no se nos olvide: lo primero que cae es el empleo y, por tanto, las oportunidades, el talento, especialmente el talento joven y la prosperidad de todos y, por supuesto, el mantenimiento de unos servicios públicos de calidad.
Fotos: Comunidad de Madrid