👉 La verdad que no sorprende porque es cierto que el proyecto está agotado y que no se puede estar engañando a todo el mundo todo el tiempo. No cabe más deterioro institucional, más descrédito internacional, más desincentivo por parte de la empresa, de los autónomos, de las familias, del mundo rural, de los problemas auténticos de España, que han estado totalmente desatendidos.
👉 La inercia ya es inevitable y yo creo que ahora solo cabe preguntarse si va a seguir pactando con estos socios, si nos va a proponer un gobierno con la ultraizquierda, con Bildu, con lo mismo que hemos tenido hasta el momento y, por tanto, si van a seguir con esas leyes con las que pretendían, por ejemplo, empezar a revisar los patrimonios y las cuentas bancarias de los periodistas o analizar los márgenes de los beneficios de las empresas… si ese camino a ningún lado que emprendían desde La Moncloa será lo que nos va a proponer.
👉 Esto ya no aguanta más. Durante estos meses decíamos que, en realidad, estas elecciones eran 8.000 mociones de censura por toda España y así ha sido y España ha hablado. Creo que, además, los ciudadanos de lado a lado, voten lo que voten, quieren a su país y nadie ha pedido que se transforme España por la puerta de atrás y menos que se haga a manos de aquellos que son partidos minoritarios nacionalistas que te lo dicen abiertamente.
👉 Creo que el camino ha sido tan largo, ha ido tan lejos la transformación o la pretendida transformación de España que España entera ha dicho basta ya y ahora están en un callejón sin salida. Y, por eso, creo que es una rendición. (Han pensado que) esto ya está, esto acaba aquí y para que acabe en diciembre igualmente y el deterioro sea mayor, pues vamos a ver si de esta manera encontramos una oportunidad.