El aprendizaje de la actual generación de nativos digitales se ha desarrollado ya en gran medida inmerso en la transformación digital. Mientras que para los adultos la llegada de la tecnología ha supuesto un profundo proceso de adaptación, que ha transformado su forma de trabajo y su vida en general, los niños demuestran soltura con los dispositivos tecnológicos.
Las nuevas herramientas ya están instaladas en la forma de aprender de los niños. Sin embargo, debemos trabajar por adaptarlas para que se conviertan en nuestras aliadas durante dicho aprendizaje. Además, si capacitamos a nuestros hijos para que sean capaces de extraer con ellas su máximo potencial, les ayudaremos a fomentar su creatividad, capacidad imprescindible en su desarrollo personal y profesional.
La creatividad es una habilidad que poseemos los seres humanos para poder crear, en todos los sentidos, y que se puede estimular para potenciarla.
En este contexto, los profesionales del colegio TEMS, The English Montessori School, nos dan algunas ideas para trabajar la creatividad de nuestros hijos a través de los dispositivos tecnológicos.
- Empecemos por crear: los propios dispositivos cuentan con aplicaciones estándar para dibujar, editar fotografías, crear cuentos o incluso una revista digital. Si damos pie a nuestros hijos a que realicen sus primeras creaciones en versión digital y hacemos un seguimiento interesándonos por sus trabajos e ideas, contribuiremos a que sigan pensando y realizando proyectos cada vez más elaborados. ¡Recuerda hacer preguntas con encanto para que perciban que realmente te importa su creación!
- Difuminar la línea entre aprender y jugar: Cuando seamos nosotros quienes realicemos una propuesta de creación, a los niños hemos de presentárselo como un juego. Dejemos en sus manos la elección de qué es aquello que quieren crear y cómo quieren hacerlo. Para motivarlos, podemos hacerles pensar que son fotógrafos, diseñadores, escritores o periodistas.
- Cuidar los contenidos y las fuentes de inspiración: Cualquier proceso de creación suele necesitar un periodo de inspiración y de pensar cómo se quiere construir. En el caso de los niños, es importante que cuidemos las fuentes y hagamos nosotros la propia selección. Cuando los niños son pequeños tienen mucha imaginación, por lo que, en principio, no será necesario que acudan a internet. Además, si nos piden ejemplos o “no saben qué hacer”, podemos proporcionárselos nosotros mismos, así, además, podremos involucrarnos en sus intereses y estilo.
Siguiendo estos consejos, podremos motivar la creatividad de nuestros hijos a la vez que capacitamos su uso de la tecnología. Igualmente, nunca podemos olvidar que es muy importante marcar tiempos y controlar el tiempo de utilización de las pantallas.
Elia Urbina
Gabinete de comunicación de TEMS
(The English Montessori School)