En la celebración de la solemnidad de san Pedro y san Pablo, el arzobispo de Venezuela denunció que la represión violenta de los cuerpos de seguridad del Estado y grupos paramilitares armados por el gobierno contra los manifestantes ha causado más de 90 víctimas mortales. A las familias de los fallecidos, el cardenales Urosa les pide «no dejarse llevar por el rencor ni por el odio»
El arzobispo de Caracas ha pedido al gobierno de Nicolás Maduro que «recapacite, que deponga esa actitud de querer implantar en Venezuela un sistema totalitario marxista y ahora también militar, militarista; y por supuesto, que desista de estar utilizando recursos legales para desmantelar el Estado».
El cardenal Jorge Urosa denunció que grupos paramilitares actúan en complicidad con cuerpos de seguridad del Estado causando muertes en la población y considera que en la situación actual del país «se podría hablar de una guerra del gobierno contra el pueblo».
«Todo eso es reprochable e intolerable y no es el camino que desea la mayoría del pueblo venezolano», advirtió el purpurado.
Urosa hizo estas declaraciones al término de la Misa que presidió en la iglesia Nuestra Señora de la Candelaria, de Caracas, con motivo de la solemnidad de San Pedro y San Pablo, y en el marco del 98 aniversario de fallecimiento del Venerable José Gregorio Hernández, un médico venezolano que espera por un milagro para su beatificación.
El cardenal Urosa, aunque habló en nombre propio, dijo que el sentir de sus palabras es el mismo de la Conferencia Episcopal Venezolana, cuya comunión y sintonía con el Papa Francisco fue ratificada en reciente visita al Vaticano.
En este contexto, el arzobispo de Caracas se refirió la situación del país, catalogándola de «sumamente grave», y rechazó la represión tanto por los cuerpos de seguridad del Estado como por grupos paramilitares en contra de los manifestantes, que a lo largo de tres meses han causado más de 90 personas fallecidas en Venezuela.
«Esas bandas armadas y cuerpos de seguridad del Estado, han causado muertes de una manera verdaderamente criminal, como por ejemplo, disparar armas de fuego directamente a la cabeza o disparar perdigones a corta distancia o las bombas lacrimógenas para causar daños mortales», denunció.
«No se puede llamar de otra manera a esa represión cruel que se ha desatado, inclusive con asedio a conjuntos de viviendas, ingreso forzado a esos lugares, ataque a las personas en sus casas sin órdenes de allanamiento», agregó.
También envió un mensaje a las familias que han perdido a sus hijos, la mayoría jóvenes, en las manifestaciones, expresando su solidaridad, su pésame y cercanía. «Las invitó a no dejarse llevar por el rencor ni por el odio, sino más bien pedirle a Dios esperanza y consuelo porque Jesucristo nos llama a participar para siempre de la vida eterna», expresó tras finalizar la misa.
Respecto a la situación de escasez de alimentos y medicamentos, el cardenal Urosa hizo un llamamiento al Gobierno para que resuelva esa situación porque las familias no tienen como hacerlo. Precisó que el Gobierno está en mora con la población y no ha cumplido con su obligación de garantizar la seguridad alimentaria a los venezolanos.
«Todo quieren resolverlo con la importación cuando nosotros tenemos una naturaleza verdaderamente generosa. Aquí, en Venezuela, no haría falta que nosotros tuviéramos que estar importando nada. Es el Gobierno el que tiene que resolver esta situación terrible y dramática de hambre, de carestía cada vez mayor», indicó.
AICA