Desde hace más de 10 años, esta organización de automovilistas ha venido solicitando la aprobación de está medida, obligatoria en Francia desde 2010.
Su presidente, Mario Arnaldo, considera que es la tecnología y no el Código Penal quién puede evitar accidentes como el ocurrido esta mañana en Fuenlabrada.
La organización de defensa de los conductores, AUTOMOVILISTAS EUROPEOS ASOCIADOS (AEA), ha manifestado, en una nota hecha pública, su preocupación por la inseguridad vial que provoca la conducción de autobuses de transporte escolar, y de transporte en general, por parte de conductores que han consumido alcohol, drogas o medicamentos.
Accidentes evitables
En este sentido, el presidente de AEA Mario Arnaldo ha manifestado que “accidentes como el ocurrido el 25 de enero podrían haberse evitado si en España se hubieran adoptado medidas tecnológicas como la que desde hace siete años funciona en Francia para los conductores de transporte público y que la AEA lleva reivindicando desde hace más de diez años”.
En Francia, todos los autocares de transporte escolar puestos en circulación a partir del 1 de enero de 2010 deben estar equipados con un “dispositivo antidrogas” que debe ser utilizado obligatoriamente por el conductor del vehículo antes de iniciar la marcha y le impediría su arranque caso de superar las tasas permitidas.
Desde el 1 de septiembre de 2015 está medida se amplió a todos los autobuses.
«Alcolock» también de serie en los coches
No obstante, AEA considera que este tipo de dispositivos para controlar el consumo de alcohol y drogas deberían instalarse en todos los vehículos, mediante su incorporación obligatoria como elemento de serie, y para ello la Comisión Europea tiene que aprobar de forma urgente una norma técnica que así lo establezca.