La comunidad judía está en shock por el terrible atentado en Bondi Beach, en el que 12 personas murieron y 29 resultaron heridas. Falleció uno de los atacantes; la policía de Nueva Gales del Sur investiga lo sucedido. La comunidad internacional, la Federación Sionista de Australia y representantes de otras religiones han condenado el ataque.
14 de diciembre 2025.- Al principio parecían fuegos artificiales, para celebrar “el festival de las luces” del judaísmo, pero luego llegó el pánico: gente huyendo y personas asesinadas a sangre fría. Esto ocurrió en la famosa playa de Bondi Beach en Sídney, donde más de 2.000 personas se habían reunido para la fiesta de Janucá. La policía de Nueva Gales del Sur, que llegó inmediatamente al lugar, confirmó al menos 12 muertos. Además, 29 personas resultaron heridas, algunas trasladadas al hospital en estado grave. Un atacante murió y otro se encuentra en cuidados intensivos; según los investigadores, habría un tercer responsable probablemente prófugo.
Según los testimonios, dos hombres descendieron de un vehículo en Campbell Parade y comenzaron a disparar de manera indiscriminada. Iban vestidos de negro, con el rostro cubierto y portando rifles semiautomáticos. En las imágenes difundidas por los medios se pueden ver numerosos proyectiles en el suelo. Entre las víctimas se encuentra también el rabino de Sídney, Eli Schlanger, junto con dos agentes de policía.
El primer ministro Minns: “Nuestro corazón sangra”
“La comunidad judía está en shock”, dijo Jeremy Leibler, presidente de la Federación Sionista de Australia. “Estamos en estado de máxima alerta”. “Nuestro corazón sangra por la comunidad judía australiana esta noche”, declaró el primer ministro de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, a los periodistas. “Solo puedo imaginar el dolor que sienten al ver a sus seres queridos asesinados mientras celebran esta antigua festividad de resiliencia y memoria”, agregó.
La condena de la comunidad internacional ha sido unánime. “Noticias profundamente angustiosas las que llegan desde Australia”, escribió en X el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, mostrando su cercanía con quienes fueron afectados por lo que calificó como un “acto horrible”. También representantes de la fe cristiana y musulmana condenaron el ataque y se unieron en oración por las víctimas. “Este es un momento en el que todos los australianos, incluida la comunidad musulmana, deben unirse con compasión y solidaridad”, declaró el Australian National Imams Council en un comunicado.
Unidos contra el antisemitismo
“El hecho de que este atentado haya ocurrido justo al comienzo de Janucá no es casual: es una fiesta que se celebra en espacios públicos. Encender las luces no es un gesto privado, sino una afirmación visible de identidad y libertad. Atacar en este momento significa querer golpear precisamente esto: la presencia judía, el derecho de los judíos a vivir abiertamente, sin tener que esconderse”, afirma en un mensaje la Unión de Jóvenes Judíos de Italia. “Frente a un aumento alarmante de los actos antisemitas en el mundo, reiteramos que la lucha contra el odio no es una batalla solo de la comunidad judía, sino una responsabilidad colectiva”.
CECILIA SEPPIA
