Carmen Pano es una mujer que tiene una edad y una situación personal en la que no está para bromas. La empresaria, y al parecer socia en alguna de sus empresas del comisionista Aldama, afirmó desde el primer momento que había llevado al cuartel general del PSOE en la madrileña calle Ferraz dos entregas en metálico por una suma total de 90.000 euros. Lo ha vuelto a ratificar ante el instructor en la Audiencia Nacional: «Dos veces durante el año 2020». ¡Ojo al dato!

Desmentida en bloque por el PSOE, especialmente por los aludidos, ha ratificado ante el juez que instruye la causa que, en efecto, fueron 90.000 euros del ala los que en modalidad de dinero negro entregó a las arcas del partido o váyase usted a saber a qué bolsillos particulares; en este supuesto, deberían ser faltriqueras de altos dirigentes de la formación en el Gobierno. No hará falta recordar al lector que Sánchez y sus cuates llegaron al poder (cuando el PSOE había besado suelo histórico en las que fueron últimas elecciones en la oposición) por un tema de corrupción del Partido Popular de Mariano Rajoy que ni por asomo revistió la gravedad como la corrupción socialista que estamos analizando.
Las encuestas vienen demostrando que desde que el empresario/comisionista Víctor de Aldama, quien durante años se paseaba por Ferraz y por los ministerios sanchistas como si fuera su propia casa, decidió tirar de la manta y autoinculparse en el delito de soborno, una inmensa mayoría de ciudadanos le conceden mayor credibilidad (ha presentado pruebas irrefutables ante fiscales y jueces que se están demostrando como ciertas, al menos, en su inmensa mayoría) al empresario que a los políticos socialistas presuntamente corrompidos.
Dicen los que siguen esta causa en la Audiencia Nacional que la señora Pano ha ratificado ante el instructor que Aldama le dio la orden tras hablar con el entonces presidente de Canarias y ahora ministro de Memoria Democrática (¡qué ironía! No recuerdan nada de sus trapacerías y quieren revisar la de hace casi un siglo), Ángel Víctor Torres. Es otro de los señalados sobre los que penden muchos quilates de sospecha.
Tengo para mí que a no tardar habrá más noticias al respecto; si se confirman en sus trazos más gruesos, Sánchez no podrá continuar ni un minuto más y su PSOE (porque es de su entera propiedad) caerá a plomo entre el deshonor, la vergüenza y el más formidable detritus que inundó jamás cualquier formación política en la España democrática.

GRACIANO PALOMO
Publicado por OKdiario el 19.4.2025