Entrevista a José de Oliveira relator en el seminario sobre la Base Nacional Curricular Común
(ZENIT – Roma).- La Comisión de Educación de la Cámara de Diputados en Brasilia, convocó un Seminario sobre el tema de la Base nacional curricular común (Bncc). Uno de los conferencistas fue el sacerdote y profesor de teología moral, Eduardo de Oliveira e Silva, a quien el coordinador de ZENIT en Brasil, Thacio Siqueira pudo entrevistar.
El sacerdote expresó su preocupación visto que “ni las mayores dictaduras de Brasil pensaron en esta idea”, ya que el Sistema Único de Educación eliminaría totalmente la libertad que tienen las escuelas de elegir sus programas de estudio y daría al Ministerio de Educación y Cultura la capacidad de imponer cualquier ideología a los niños brasileños.
El padre José Eduardo señala que la idea partió de una enmienda constitucional en el 2009, que se refería al presupuesto de Educación y que acabó siendo un Caballo de Troya. El primer problema es que la ley enuncia este Sistema Nacional de Educación pero no lo define y por ello es necesario, asegura, interpretarlo de acuerdo a la Constitución federal del país.
Además precisa que en el pasado ya se presentaron propuestas para que en el país haya un sistema único de educación y la más importante acabó rechazada en agosto de 1989. Si bien, precisa que históricamente ya en la época del presidente Getulio Vargas había un proyecto que cayó junto a la dictadura militar.
El profesor de teología moral reconoce que existe la posibilidad de un auténtico sistema de educación única, basado en el artículo 211 de la Constitución, que indica que el país, los estados o provincias, municipios y otros entes, puedan organizarse en un sistema de colaboración con sus sistemas de enseñanza.
Añadió que las bases curriculares ya existen, comunes para las escuelas de enseñanza media, pero que con la idea de “sistema único” de educación ahora se están creando bases curriculares demasiado detalladas.
Y el peligro es que tomen sentido ideológico, al punto que la primera versión de las Bncc eran claramente de inspiración marxista, mientras la segunda fue más diluida. Pero lo peor, asegura el profesor, es que una vez que se implante el sistema, el gobierno de turno podrá imponer la ideología que quiera.
La solución, indica el entrevistado, es trabajar para obtener no una Bncc detallada, sino con orientaciones generales que garanticen la gradual autonomía de los sistemas de enseñanza y que se respete la autonomía de estos.