El próximo domingo, 24 de noviembre, en la Basílica de San Pedro, la representación de la juventud portuguesa entregará a la juventud coreana los símbolos de la Jornada Mundial de la Juventud: la Cruz y la copia del Icono de la Salus Populi Romani. El gesto simbólico se realizará al final de la Misa celebrada por el Papa Francisco.
Ciudad del Vaticano, 22 de noviembre 2024.- El domingo 24 de noviembre, solemnidad de Cristo Rey del Universo, al final de la Misa celebrada por el Papa Francisco a las 9.30 con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud a nivel diocesano, se realizará el paso de los símbolos de la JMJ – la Cruz y la copia del icono mariano Salus Populi Romani – en la basílica vaticana de un grupo de jóvenes portugueses a sus compañeros coreanos.
Así lo ha anunciado hoy, miércoles 20 de noviembre, el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, recordando que la 39ª Jornada Mundial de la Juventud – sobre el tema «Quienes esperan en el Señor caminan sin cansarse» (cf. Is 40, 31) – se realizará en todo el mundo a nivel de las Iglesias particulares.
En peregrinación por toda Asia
Los dos símbolos de la JMJ serán entregados, antes de los ritos de conclusión, por una delegación de chicas y chicos de Portugal – en cuya capital, Lisboa, tuvo lugar el último encuentro internacional en 2023 – a los jóvenes de Seúl, que podrán así llevarlos en peregrinación al país asiático donde tendrá lugar la próxima edición en 2027. También viajarán a otros lugares de Asia, en las ciudades y en el campo, llegando a los que sufren, a los presos, a los pobres y a los jóvenes sin esperanza para ofrecerles a ellos cercanía y consuelo.
«Esta peregrinación es especialmente significativa – explica el Dicasterio – porque se desarrollará en países predominantemente no cristianos. Se espera que muchos jóvenes se conviertan en ‘incansables misioneros de la alegría’, de modo que incluso aquellos que nunca han participado en una JMJ en los próximos tres años recorrerán un camino, sobre todo interior, para llegar a dar un valiente testimonio de Cristo».
De lo particular a lo universal
Llegarán un centenar de jóvenes procedentes de Portugal, acompañados por el patriarca de Lisboa, Rui Manuel Sousa Valério, y por el cardenal Américo Manuel Alves Aguiar, que fue coordinador general de la JMJ en Lisboa; desde Corea llegarán otros tantos chicos y chicas, junto con el arzobispo de Seúl, Peter Chung Soon-taek, y el obispo coordinador general de la JMJ de la edición de 2027, Paul Kyung Sang Lee.
La celebración del domingo en San Pedro será una celebración de carácter local y universal: los jóvenes romanos estarán presentes en la JMJ diocesana junto con su obispo, el Papa Francisco, pero también participarán en el evento jóvenes de todo el mundo, representando la riqueza y la diversidad vocacional de cada uno.
Desde hace años, los símbolos de la JMJ acompañan los preparativos de las ediciones internacionales de la Jornada: la Cruz de la Juventud fue confiada a los jóvenes por San Juan Pablo II con motivo del primer encuentro juvenil en 1984. Desde 2003, Ha sido acompañado en la peregrinación por el icono de Maria Salus populi romani, signo de la ternura materna de María y de la maternidad de la Iglesia para toda la humanidad.
LORENA LEONARDI