La Comisión Interamericana de Derechos Humanos alerta sobre el maltrato físico y psicológico que sufren las personas privadas de libertad en el país centroamericano. Pide al gobierno que ponga fin a la persecución de opositores políticos y activistas de derechos humanos.
13 de octubre 2024.- Palizas, aislamiento prolongado, privación del sueño, descargas eléctricas. En las cárceles de Nicaragua, lo que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) -órgano autónomo de la Organización de Estados Americanos- en una denuncia pública y detallada califica de graves violaciones contra las personas privadas de libertad.
Tras recoger los testimonios de algunas de las 135 personas exiliadas en Guatemala el 5 de septiembre de 2024, entre ellas también laicos de la Iglesia católica y misioneros, la Cidh dibujó un panorama dramático: condiciones de detención deplorables, falta de acceso a agua potable, alimentación insuficiente y de mala calidad, interrogatorios constantes, atención médica negligente.
La CIDH informa también que al menos 36 personas siguen encarceladas ilegalmente en el país centroamericano, y hace un enérgico llamamiento al gobierno nicaragüense para que libere inmediatamente a todas las personas privadas arbitrariamente de libertad y ponga fin a la persecución de opositores políticos y activistas de derechos humanos. Asimismo, se hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que brinde protección y apoyo a quienes abandonan el país tras haber sido injustamente encarcelados.
L’OSSERVATORE ROMANO