En un comunicado, se expresa tristeza por ciertas escenas de la ceremonia de apertura de los Juegos Paris 2024, «un prestigioso acontecimiento en el que el mundo entero se une en torno a valores comunes» y en el que «no debe haber alusiones que ridiculicen las creencias religiosas de muchas personas».
Ciudad del Vaticano, 3 de agosto 2024.- La Santa Sede expresa su tristeza y pesar en un comunicado relativo a la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París el pasado 26 de julio.
Una ofensa a los cristianos y a los demás creyentes
«La Santa Sede -se lee en el texto-, entristecida por algunas escenas de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París, no puede sino unirse a las voces que se han alzado en los últimos días para deplorar la ofensa causada a muchos cristianos y creyentes de otras religiones».
Es necesario respetar a los demás
«En un acontecimiento prestigioso, en el que el mundo entero se une en torno a valores comunes», prosigue el comunicado, «no debe haber alusiones que ridiculicen las convicciones religiosas de muchas personas». En conclusión, la Santa Sede subraya que «la libertad de expresión, que evidentemente no se cuestiona, encuentra su límite en el respeto a los demás».