La orgía de descalificaciones a la prensa libre que osa publicar en la mayor parte de los casos hechos y realidades irrefutables respecto a las andanzas de la señora del presidente del Gobierno, segunda dama del país, no tienen parangón alguno en el mundo libre y democrático.
Cuando algún medio o profesional periodista mete la pata a sabiendas o por ignorancia y provoca daño, lo que se suele hacer en aquellos predios libres es acudir a las instancias judiciales para dejar a salvo almas y patrimonio. Punto. Lo que no se hace, resulta inútil, es descalificar al mensajero sólo porque te han puesto delante del espejo. Punto.
Desde el particular «muro», preñado de intereses personales, que la izquierda y los ultraderechistas independentistas han levantado para distinguir los buenos de los malos, los puros de los corruptos, resulta hasta lógico. Aparece la típica superioridad moral de la izquierda, que en todos casos resulta supuesta.
Vamos al caso. Doña Begoña Gómez, segunda dama del país que vive, duerme y viaja por cuenta del contribuyente, aparece involucrada en una serie de asuntos en los que sólo pudo tener éxito por su proximidad al poder, es decir, a su marido, que ya ha dicho que está «profundamente enamorado». Si todo es falso, fachoso, espurio, oiga no hacen falta superasesores bien regados con dinero de los contribuyentes, se convoca una conferencia de prensa y se dan explicaciones. Han hecho todo lo contrario: descalificar, insultar, menospreciar, amenazar, etc.
No dan explicaciones porque no pueden darlas. Punto. Con su famosa carta a la ciudadanía –¿para qué demonios está el Congreso de los Diputados o el Senado?–, Sánchez y su amantísima esposa han cometido un error de proporciones internacionales que afecta, por ende, el prestigio y la reputación del país que les da de comer opíparamente. Por vez primera desde hace medio siglo, una mujer del presidente del Gobierno sale en la prensa internacional vinculada a la palabra maldita: corrupción.
Es uno de los corolarios más letales de la famosa «carta a la ciudadanía». Tiro por la culata.
Explicaciones, oigan, explicaciones.
GRACIANO PALOMO
Publicado en OKdiario el 28.4.2024.