Al menos tres mujeres y cuatro niños murieron en el ataque pakistaní del jueves 18 de enero por la mañana contra la ciudad iraní de Saravan, en respuesta a las incursiones de Teherán en territorio pakistaní hace dos días. Según Islamabad, se trataba de «ataques de precisión contra objetivos terroristas». Mientras tanto, en la Franja de Gaza, 20 personas murieron en el último asalto israelí anoche en la ciudad de Rafah.
18 de enero 2024.- «Ataques de precisión altamente coordinados y específicamente dirigidos contra escondites terroristas, grupos militantes antipakistaníes rastreables hasta el llamado Sarmachar dentro de Irán». Así ha motivado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Islamabad el atentado perpetrado en la madrugada del jueves 18 de enero, en la ciudad iraní de Saravan, en la región sudoriental de Sistán y Beluchistán, en la frontera con Pakistán. En la operación murieron al menos tres mujeres y cuatro niños, todos ellos de nacionalidad no iraní. El ataque es una respuesta a las redadas contra «objetivos terroristas» llevadas a cabo hace un par de días por Irán en territorio pakistaní.
El conflicto en la Franja de Gaza
Mientras tanto, en Gaza, el número de muertos continúa: la cifra de víctimas mortales del ataque israelí de anoche en la ciudad meridional de Rafah ha aumentado a 20, mientras que las operaciones militares también continúan en Jan Yunis, donde al parecer están operando de manera diferente, «en un esfuerzo combinado dirigido contra los dirigentes de Hamás y los rehenes», como señaló el ministro de Defensa, Yoav Gallant. Según la emisora árabe Al Yazira, además, se habrían producido decenas de detenciones en Cisjordania por parte de las fuerzas israelíes: al menos 46 personas fueron detenidas en la zona de Belén.
Guerra «probable» en Líbano
En cuanto al frente norte, el jefe del Estado Mayor del ejército israelí, Herzi Halevi, al término de un ejercicio de tropas en la frontera con Líbano, declaró que «la probabilidad de guerra en los próximos meses en la zona es mayor que en el pasado». El objetivo es permitir el regreso de los habitantes israelíes a la alta Galilea y a otras localidades del norte del país que están en el punto de mira de los disparos de Hezbolá desde octubre. En el plano diplomático, el primer ministro israelí, Benyamin Netanyhau, habría rechazado una propuesta del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, de normalización con Arabia Saudí a cambio de una «vía» para el nacimiento de un Estado palestino. Así lo informó la cadena estadounidense NBC News, recogida posteriormente por los medios israelíes, según la cual Netanyahu dijo que «no estaba preparado» para un acuerdo de este tipo sobre el Estado palestino. Blinken objetó que la falta de voluntad de los dirigentes israelíes sobre este asunto hará que la historia se repita. Según NBC, Netanyahu aceptaría, sin embargo, contener un ataque más amplio en Líbano.
ROBERTA BARBI
Imagen: El hospital de Beluchistán iraní donde se atiende a los heridos en los atentados Irán-Pakistán.