“Los Escipiones. Roma conquista Hispania”, se podrá contemplar en el Museo Arqueológico Regional hasta septiembre
Recoge más de 200 piezas, entre ellas un espectacular busto de Escipión El Africano
Narra el periplo militar de esta familia noble en su conquista de Hispania
La toma de Numancia, el desembarco en Ampuria y las figuras de esta familia, que culmina con Augusto, completan la exposición
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha inaugurado la primera exposición en España dedicada exclusivamente a Los Escipiones, la saga legendaria de políticos y militares romanos que conquistaron Hispania y cambiaron nuestro país. Así, hasta el próximo mes de septiembre, el Museo Arqueológico Regional, ubicado en Alcalá de Henares, albergará esta muestra, que reúne más de 200 piezas, entre las que destaca una espectacular cabeza de Escipión El Africano, procedente de Italia.
Cifuentes, que ha estado acompañada por el director del Museo Arqueológico Regional, Enrique Baquedano, y por el comisario de la exposición, el catedrático de Arqueología Manuel Bendala, ha animado a todos los madrileños a visitar esta exposición y a “y adentrarse en una de las páginas más importantes y atractivas de nuestra historia”.
Asimismo, la presidenta regional ha recordado que este mismo año se iniciarán las obras de ampliación del Museo, que permitirá a “esta Gran Máquina del Tiempo, conocida también como la Casa de los Arqueólogos”, cumplir sus funciones. Además, explicó que acaban de finalizar las obras de remodelación de una nave cedida por el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, que se convertirá en almacén de vestigios arqueológicos de toda la Comunidad de Madrid.
La muestra inaugurada se ha dividido en seis espacios diferenciados por su contenido y empieza con un acercamiento a la personalidad pública de esta notable familia de políticos y militares de la Roma republicana. A partir de aquí, explica el funcionamiento del Ejército romano y su importancia a la hora de conformar un modelo que resultó tremendamente eficaz en la romanización de los territorios ocupados.
Deteniéndose en la importancia de la armada romana, la tercera sala narra el desembarco de las tropas en el año 218 a.C. en Ampurias. Con la llegada de los dos primeros Escipiones, Cneo, al que le sigue su hermano Publio Cornelio, tío y padre del famoso Africano, empezó la campaña de conquista y ocupación de Hispania.
Ampurias se convirtió en su principal base militar y administrativa y fue punto de partida para la romanización de la península, en la que Tarraco jugó un papel fundamental. Hay piezas muy expresivas de ambas ciudades que ilustran las transformaciones sufridas, en un mismo territorio, por la convivencia de comunidades culturalmente tan ricas y diversas como la griega, la latina y la ibérica.
El cuarto espacio estudia la figura de Escipión el Africano -apodo que mereció tras su victoria sobre el gran general cartaginés Aníbal en su propia territorio-, el gran conquistador de Hispania: desde la toma de la capital hispana de los cartagineses -Qart Hadasht, después Carthago Nova (actual Cartagena)- hasta la fundación de Itálica, próxima a la fenicia Spal (Sevilla).
Toma de Numancia
La siguiente sala se ocupa esencialmente de Escipión Emiliano, nieto y continuador del legado de Escipión el Africano, quien puso fin a las ambiciones de Cartago destruyéndola por completo. Enviado a la provincia de Hispania con el objetivo de reconducir el conflicto con los belicosos celtíberos, protagonizó uno de los episodios más importantes de la conquista romana y uno de los más presentes en el ideario colectivo español: la toma de Numancia.
El recorrido termina con una representación del complejo perfil ideológico y político de los Escipiones, evocando al emperador Augusto, entendido como culminación de esta saga que cambió para siempre la historia de España. La llegada de los romanos a la Península no solo supuso un cambio trascendental para sus habitantes, sino que resultó un camino de ida y vuelta en el que los Escipiones se vieron vivamente influenciados por lo que vieron y vivieron en su periplo hispano. Así, tuvieron influencias meramente técnicas, como la de las armas nativas en la definición de la espada o gladius romano (llamado gladius hispaniensis) y otras más sutiles pero profundamente poderosas que tienen que ver con la influencia orientalizante y el proceso de deificación a la manera de
Alejandro Magno, que después recogerá Augusto en su ascensión hacia el imperio.
Las obras expuestas han sido cedidas por diversas instituciones públicas y privadas, tanto españolas como de otros países. Destacan las provenientes de las colecciones de los Museos Nacionales italianos y de la ciudad de Roma, como la cabeza de Publio Cornelio Escipión Africano.
Otras obras destacadas son el relieve con amontonamiento de armas, procedente de la colección privada de los Duques de Cardona, el relieve de los guerreros de Estepa (Sevilla) cedido por el Museo Arqueológico de Sevilla, el torso de guerrero con peto en forma de lobo de La Alcudia de Elche, el Caballero de los Villares del Museo de Albacete o el Vaso de la doma del caballo procedente del Museo Numantino de Soria.
Para completar la muestra se ha editado un catálogo compuesto por 17 artículos elaborados por los principales especialistas en la materia y desarrollados a través de más de 400 páginas y las fichas catalográficas de toda la obra expuesta, que permanecerá, sin duda, como referente en la investigación en esta materia. Esta exposición supone la continuación de «Fragor Hannibalis. Aníbal en Hispania» que narraba la historia del cartaginés Aníbal en nuestra Península, y que pudo verse hace tres años en esta misma institución.