Es difícil encontrar un jefe de Gobierno en España que haya tenido más comprensión por parte de los gobernados y que tras un lustro infinito de mentiras, abuso de poder y múltiples viajes a ninguna parte, aparezca hoy ante los ciudadanos contribuyentes como un pollo sin cabeza, un todavía primer ministro enfurecido porque el pueblo no le quiere, en definitiva, un sujeto al que hay que descabalgar democráticamente del poder a la primera oportunidad, es decir, el próximo mes de julio.
¿Por qué hay que echar a Sánchez con la aquiescencia de la mayoría? Por las siguientes razones básicas:
– Desde su llegada al poder mediante una moción de censura fake utilizó los poderes del Estado para colocar bombas nucleares precisamente en el mismo corazón del Estado de Derecho, sin importarle que con esos procederes ponía en almoneda al mismo.
– Porque ha mentido tanto y a tanta gente que resulta imposible a estas alturas creerle ni una sola palabra, aunque la diga con tanto énfasis como ridiculez de su costumbre.
-Porque ha utilizado el dinero de los españoles exclusivamente para sus predios electorales y políticos, olvidando que un jefe de Gobierno está para atender los cantos y susurros de todo el pueblo.
– Porque, uno tras otro, en cinco años ha sido capaz de subir 57 impuestos que han colocado a las clases medias, autónomos y profesionales en situación muy difícil y a miles de ellos al borde de la extinción.
– Porque en lugar de aplicar el sentido común y el interés general en sus decisiones antepone las ganancias a título personal, importándole una higa el resultado final para la permanencia de una gran nación que al día de hoy cuentas los días para desembarazarse de tan tóxico personaje.
– Porque, contrariamente a lo afirmado 20 docenas de veces, pactó con los enemigos de una inmensa mayoría del pueblo español que desea seguir habitando la nación española y denominarla como se la ha conocido durante muchos siglos.
– Porque sus pactos inconfesables con bilduetarras, separatistas golpistas, comunistas melancólicos de Lenin, Stalin, Castro, Chávez, Maduro y Kirchner, son incompatibles con un presidente del Gobierno de un país miembro de la Unión Europea. Tan incompatibles como los procederes de un Sánchez desaforado y podemizado atacando brutalmente contra todo aquél que no le baila el agua y no le da cobertura en las urnas.
– Porque ha convertido al PSOE que fue pieza clave en la Transición en un guiñapo, poniendo a la histórica formación de rodillas ante un secretario general que actúa como un sátrapa irredento.
– Porque ha elevado los índices de pobreza de los españoles a cotas desconocidas. Mientras él derrocha y se conduce como un Trump cualquiera, miles y miles de ciudadanos empobrecidos hacen cola a las seis de la mañana en los comedores de Cáritas y otras organizaciones de caridad y compasión.
Por todo lo descrito anteriormente con hechos demostrables, ¿cree el lector que Pedro Sánchez se merece continuar durmiendo en su mullido colchón monclovita y seguir abrevando a costa de unos ciudadanos que no pueden más?
GRACIANO PALOMO
Publicado en OK diario.
Sábado 10 de junio 2023.