La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, acaba de escenificar su ruptura con Vox en un ejercicio tan propio como cabalmente expresado. Tengo para mí que es la puerta que le puede abrir un nuevo escenario con una mayoría aplastante y, que de paso favorecerá electoralmente también al alcalde Almeida.
Sin embargo, para interpretar las municipales y autonómicas del próximo 28 de mayo en clave de comicios generales, hay que prestar atención a lo que ocurra en la ciudad de Valladolid, donde el imbatible Óscar Puente podría tener que dejar la vara de mando al candidato popular Jesús Julio Carnero. Un botón de muestra de lo que pudiera ocurrir en el resto de las amplias mesetas de la vieja y reseca España.
En este sentido, un principal foco de atención reclama la atención del observador en la inmortal ciudad de Sevilla. El centroderecha ya gobernó la capital hispalense y podría volver a hacerlo para apuntalar el poder del PP de Juanma Moreno. Se le antoja al columnista sumamente relevante la opinión mayoritaria de los sevillanos.
La Comunidad Valenciana aparece también con muchos interrogantes. El poder del melifluo Ximo Puig baila en el alambre y también el sillón que durante tantos años fue predio exclusivo de la gran Rita Barberá. Vendría luego la tierra de Don Quijote, donde el invicto García-Page lleva razón al acusar a su jefe de filas de coadyuvar para que los castellano-manchegos tengan dudas. Son paisajes esenciales para poder emitir opinión respecto a lo que ocurrirá cuando llegue el invierno en todo el territorio nacional.
Quedan pocas dudas respecto a que los largos e insufribles mandatos de Revilluca en la bella tierra cántabra tocan a su fin. ¡Chorradas las justas! A partir del 28M podrá pasearse por los platós de televisión a repetir las mismas monsergas con las consiguientes perogrulladas. Puede que al bueno de Lambán le ocurra algo parecido, pero este aragonés nada tiene que ver, por seriedad, con el santanderino. ¡Ya queda poco!
GRACIANO PALOMO
Publicado por okdiario
Domingo 26 de marzo 2023