¿Hará falta recordar que el 1 de junio del 2018 el Gobierno Rajoy cayó a plomo por una sentencia judicial -luego en parte revocada por el Tribunal Supremo, lo cual no resta un ápice a las responsabilidades penales de aquellos y las consecuencias políticas derivadas- de la que hábilmente se aprovechó Sánchez (85 escaños) prometiendo que sería implacable con la corrupción?.
Lejos de aplicarse a sus promesas solemnes -sedes parlamentarias y debates electorales-, el gobierno PSOE/Podemos ha rebajado de tal forma el delito corrupto y corruptor de la malversación de fondos públicos, que nada tiene de extraño que el pueblo llano se malicie lo peor, esto es, que se ha perpetrado tamaña indignidad para favorecerse y favorecer a sus amigos y aliados políticos. Y ese pueblo soberano, pagano e inerme, estará en lo cierto. El horno valenciano bulle calentito. Francisco Martínez Rico, doce años como gerente del PSOE en la Comunidad Valenciana, ha confesado ante la Guardia Civil (Udyco) que este partido, es decir, el socialista que dirigía el actual mandatario autonómico, Ximo Puig, se financió ilegalmente durante años, utilizando el sistema tan burdo y socorrido de adjudicar obras a un empresario para que luego este abonara las mordidas a modo del pago de las campañas y a título personal. Quizá ahora se comprenda mejor el interés de Sánchez en rebajar las penas por malversación, amén de las exigencias conocidas por parte de los separatistas.
Durante muchos años y con gran virulencia, la izquierda valenciana acusó al PP de corrupción; lograron alcanzar el poder basándose en las situaciones creadas ahora. Además del PSOE, por ahí anda en Compromís, el bueno de Baldoví y la del paro que han sido látigo exigente en estas materias. ¡Ignoro si recibieron tantas ‘ayudas’ de sus amigos y correligionarios de Cataluña como se dice…! De modo y manera, que el monumental e insoslayable escándalo Azud golpea con precisión exigida al presidente Ximo Puig, que aspira, naturalmente y mirando hacia otro lado, a seguir mandando en esa laboriosa y emergente comunidad valenciana. ¿Obviamos lo de sus dineros procedentes del periódico Mediterráneo? ¿Pasamos de puntillas sobre las subvenciones y regalías a las empresas de su hermano o allegados? ¡Algo huele a podrido en la singular tierra levantina! Algo o mucho…
GRACIANO PALOMO
Publicado en okDiario
31 de diciembre 2022