La diócesis de Tilarán – Liberia, distribuyó algunas fotografías del éxodo que vivieron las monjas pues fueron expulsadas desde el interior de Nicaragua.
(ZENIT Noticias / San José de Costa Rica, 8.7.2022).- El miércoles 6 de julio el régimen de Daniel Ortega cumplió la sentencia de expulsión de las religiosas de madre Teresa de Calcuta presentes en Nicaragua desde 1988. Aunque ya en los dos días previos las religiosas estaban sometidas a asedio y vigilancia, el miércoles 6 de julio los agentes del gobierno nicaragüense y la policía trasladó a la frontera con Costa Rica a las casi 20 religiosas de la comunidad, entre las que se incluía a dos monjas nicaragüenses. Atrás quedó no sólo su casa de residencia sino también los cientos de personas que las religiosas atendían y que ahora quedan en el desamparo.
La diócesis de Tilarán – Liberia, distribuyó algunas fotografías del éxodo que vivieron las monjas pues fueron expulsadas desde el interior de Nicaragua, concretamente desde Granda y Managua, a la frontera con Costa Rica, a donde lograron pasar gracias a la acogida que el obispo de esa diócesis costarricense les ha dispensado. De hecho, el obispo Manuel Eugenio Salazar fue quien personalmente envió sacerdotes católicos para recibir a las monjas. “Las confortamos, secamos algunas de sus lágrimas”, refiere el obispo en unos videos posteados en redes sociales. Y añade: “Si por ellas hubiera sido se quedan en Nicaragua. Aman a Nicaragua, al pueblo nicaragüense, especialmente a los más pobres y necesitados”.
Redacción Zenit
Imagen de portada: Las religiosas expulsadas de Nicaragua
llegan a Costa Rica.
(Foto: Diócesis de Tilarán – Liberia)