En cuanto a la crisis de Ucrania, el presidente estadounidense, Joe Biden, teme una incursión de las tropas de Moscú en territorio ucraniano. Los funcionarios de Kiev se muestran preocupados y el gobierno ruso califica las palabras de Biden como «desestabilizadoras». La Unión Europea se declara dispuesta a imponer nuevas sanciones a Moscú, mientras Washington da luz verde a la transferencia de armas de fabricación estadounidense desde los países bálticos a Ucrania.
Ciudad del Vaticano, 21 de enero 2022.- «Podría haber una incursión parcial y acabaríamos topándonos entre lo que se debe hacer y lo que no se debe hacer». Así lo afirmó el presidente estadounidense Joe Biden en la rueda de prensa con motivo del primer año de su mandato, que han causado preocupación en Kiev.
Funcionarios de Kiev «sorprendidos”
La cadena estadounidense CNN cita a funcionarios ucranianos que se mostraron atónitos, porque leyeron en las declaraciones del presidente estadounidense el hecho de que, en caso de invasión rusa, la respuesta occidental no sería automática. La Casa Blanca se apresuró entonces a aclarar, explicando que habría una «respuesta dura y unida de Estados Unidos y sus aliados» ante cualquier cruce de la frontera. «Si hacen lo que son capaces de hacer con fuerzas masificadas en la frontera – añadió Biden – acabará siendo un desastre para Rusia».
Aprobación de la transferencia de armas a Ucrania
El verdadero quid de la cuestión sigue siendo el ingreso de Kiev en la OTAN, una hipótesis que Moscú quiere evitar por todos los medios. Biden descartó la incorporación de Ucrania a corto plazo, pero dejó abiertas las puertas de la Alianza Atlántica, porque «cada uno – dijo – puede elegir con quién aliarse». Mientras tanto, todos los servicios diplomáticos están prestando la máxima atención. Hoy en Berlín, Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y Alemania mantienen conversaciones sobre la crisis, mientras mañana el secretario de Estado estadounidense, Blinken, se reunirá con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Lavrov, en Ginebra, Suiza.
Y precisamente en Berlín, un funcionario estadounidense, en el séquito de Blinken, informó que Washington había aprobado la petición de los países bálticos de poder enviar armas estadounidenses a Ucrania por temor a una invasión rusa. Estados Unidos está «acelerando las transferencias autorizadas de equipos de origen estadounidense de otros aliados», dijo. Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también intervino en el Foro de Davos y afirmó que, si Moscú ataca a Ucrania, Europa impondrá sanciones masivas «económicas y financieras».
Ucrania, frío ante el diálogo Rusia-OTAN
Mientras para la OSCE hay riesgo de guerra, esta mañana Moscú también reaccionó a las declaraciones de Biden, calificándolas de desestabilizadoras.
“Las declaraciones se repiten incesantemente y no contribuyen en absoluto a aliviar las tensiones actuales. Es más, pueden contribuir a desestabilizar la situación”.
Así lo subrayó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. Por su parte, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, se hizo eco de sus palabras y pidió a Occidente que deje de «apoyar la militarización de Ucrania atrayéndola a la OTAN».
Eleonora Tafuro: Ucrania teme el desinterés de EEUU
“Las palabras de Biden han provocado una reacción tan fuerte, porque los aliados y Ucrania saben muy bien que la OTAN nunca intervendrá militarmente en favor de un país que no es su miembro, ya que el artículo 5 sobre defensa colectiva no lo contempla. Por eso temen que Estados Unidos no preste atención a esta parte del mundo”.
Entrevistada por Radio Vaticano-Vatican News, Eleonora Tafuro, investigadora del Instituto para los estudios de política internacional (Ispi) y experta en Europa del Este, se centra en las reacciones a las palabras del presidente estadounidense Biden.
Nadie cede al chantaje cruzado
Según la investigadora Eleonora Tafuro el ingreso de Ucrania en la OTAN sigue siendo una opción difícil, y recuerda la oposición de muchos países de la Alianza Atlántica que no quieren perturbar las relaciones con Rusia, «sin embargo, queda la cuestión de principios de la OTAN – explica – que defiende su política de puertas abiertas y la oposición al chantaje de Rusia». Por todo ello, Eleonora Tafuro cree que está resurgiendo la «guerra híbrida», a través de los ataques de hackers y la exacerbación de ciertas crisis sociales entre los habitantes de las regiones mayoritarias de habla rusa y los de Ucrania occidental. Desde el punto de vista militar, la guerra no es conveniente para Moscú – continuó – pero el gobierno ruso no puede quedarse de brazos cruzados si se ignoran sus demandas, por lo que es importante continuar con el diálogo diplomático.
La importancia de la vía diplomática
La investigadora de Ispi recuerda que la situación sobre el terreno, en los territorios disputados por las entidades separatistas del Donbass, sigue estando fuera del control de Ucrania, mientras continúan los combates. Sin embargo, por el momento, la concentración de tropas rusas en la frontera es sólo una demostración de fuerza muscular, pero «el problema es que en una situación como ésta – continúa Tafuro – incluso un solo episodio puede crear una escalada dramática». La diplomacia ha sido muy decepcionante – dijo a modo de conclusión – pero el mero hecho de que el diálogo continúe es un factor positivo; por otra parte, Rusia no considera que una invasión sea una opción preferente, sino que quiere obligar a Estados Unidos a mantener un debate sobre la configuración de la seguridad europea que respete los temores rusos”.
Marco Guerra (Vatican News)
Imagen: El Hotel President de Ginebra, donde se celebró la cumbre sobre la crisis de Ucrania
entre el Secretario de Estado estadounidense, Blinken,
y el Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Lavrov
(Foto: AFP)