En vísperas de la precumbre de Sistemas Alimentarios de la ONU que se celebrará en julio en Roma, el miércoles tuvo lugar el segundo un seminario web de tres partes, organizado por la Santa Sede, bajo el título «Justicia alimentaria: Empleo, innovación y finanzas al servicio de la justicia alimentaria». En su intervención, el cardenal Turkson subrayó que urge «reconstruir los sistemas alimentarios».
26 de mayo 2021.– El miércoles por la tarde tuvo lugar el segundo de una serie de tres seminarios web titulados «Alimentos para la vida, justicia alimentaria, alimentos para todos», en el que participaron la Misión Permanente del Vaticano ante la FAO, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral y la Comisión COVID-19 del Vaticano, junto con sus colaboradores que trabajan en el ámbito de la seguridad alimentaria.
Justicia alimentaria
En esta sesión se trató el tema «Justicia alimentaria: El trabajo, la innovación y las finanzas al servicio de la justicia alimentaria» destacando la importancia del trabajo digno, las finanzas y la innovación para reconstruir sistemas alimentarios sostenibles, especialmente de cara al período de las post-pandemia.
Entre los participantes se encontraban varios expertos de alto nivel que abordaron la necesidad de un nuevo paradigma de desarrollo y reforzaron el llamamiento a una ecología integral promovido por el Papa Francisco en la encíclica Laudato si’.
Uno de los objetivos del seminario es contribuir a los actuales debates mundiales sobre una recuperación justa y sostenible tras la crisis del coronavirus, con propuestas y sugerencias para el plan de acción que se debatirá en la Cumbre de Sistemas Alimentarios de la ONU.
El encargado de abrir el seminario web del miércoles fue el Prefecto del Dicasterio, el cardenal Peter Turkson, quien afirmó que «la falta de alimentos está inextricablemente unida a otras luchas sociales, agravadas por la pandemia». El purpurado continuó explicando que la inseguridad alimentaria no es simplemente la falta de alimentos:
«La pobreza, la marginación, la falta de procesos políticos democráticos, los conflictos, la destrucción del medio ambiente y la pérdida de biodiversidad, así como las consecuencias del cambio climático, contribuyen a la inseguridad alimentaria, aumentan las desigualdades y empeoran las condiciones de las comunidades vulnerables en todo el mundo, debilitando un sistema alimentario mundial ya roto».
Reconstruir los sistemas alimentarios
Asimismo, el cardenal subrayó que hay una necesidad urgente de reimaginar y reconstruir los sistemas alimentarios, para que «sean más resistentes, inclusivos y sostenibles». No se trata de una «empresa imposible», dijo, ya que «tenemos el potencial de embarcarnos en este viaje juntos, tomando esta crisis del Covid como una oportunidad única».
La población mundial en grave situación de inseguridad alimentaria
El cardenal Turkson puntualizó que al hablar de potenciales, «destaca el que proviene de la dignidad y el esfuerzo de los trabajadores agrícolas; la creatividad y el dinamismo de la tecnología y la innovación; así como el apoyo de los mercados financieros bien diseñados y regulados para facilitar el acceso universal a los alimentos».
Cada uno de estos elementos, añadió el purpurado, «tiene algo que aportar a todas las etapas de los sistemas alimentarios: desde ser pioneros en modelos de producción y consumo de alimentos que respeten los ciclos naturales de nuestra casa común, hasta garantizar la resiliencia de los sistemas alimentarios para que puedan seguir proporcionando alimentos a todo el mundo a través de crisis como la actual».
Vatican News
Imagen: La ONU informa que la población mundial está en grave situación de inseguridad alimenaria