“El legado de encuentro y diálogo del jeque Mujibur Rahman a los bengalíes, la preocupación de los Papas por Bangladesh, y los esfuerzos para trabajar por la paz y la prosperidad de esta noble nación”, lo temas al centro del mensaje del Santo Padre al pueblo de Bangladesh, con ocasión del centenario del nacimiento del jeque Mujibur Rahman y el quincuagésimo aniversario de la independencia de este país asiático.
Ciudad del Vaticano, 24 de marzo 2021.- “Los animo a cada uno de ustedes, especialmente a la generación más joven, a renovar sus esfuerzos para trabajar por la paz y la prosperidad de la noble nación que representan. Y les pido a todos ustedes que continúen con su compromiso de generosidad y ayuda humanitaria a los refugiados, los más pobres, los desfavorecidos y los que no tienen voz”, lo afirma el Papa Francisco en un vídeo mensaje dirigido al “amado pueblo de Bangladesh”, con ocasión del centenario del nacimiento del jeque Mujibur Rahman y el quincuagésimo aniversario de la independencia de este país asiático, conocido como la “Bengala de oro”.
Mujibur Rahman promovió la cultura del encuentro y diálogo
El Santo Padre al unirse al pueblo de Bangladesh en la acción de gracias “por las muchas bendiciones recibidas” recuerda que, es un país de rara belleza natural y una nación moderna, que se esfuerza por mantener la unidad de la lengua y la cultura con el respeto a las diversas tradiciones y comunidades que la habitan. “Esto – señala el Pontífice – es uno de los legados que el jeque Mujibur Rahman ha dejado a todos los bengalíes. Él promovió una cultura del encuentro y del diálogo, caracterizada por la sabiduría y una visión amplia y previsora. Estaba convencido de que sólo en una sociedad pluralista e inclusiva, en la que toda persona pueda vivir en libertad, paz y seguridad, solo así es posible construir un mundo más justo y más fraterno”.
Bangladesh siempre ha estado en el corazón de los Papas
Por ello, siguiendo los pasos de mis predecesores, señala el Santo Padre, pude experimentar este patrimonio y legado cultural de primera mano durante mi Visita Apostólica a Bangladesh en agosto de 2017. “Bangladesh – subraya el Papa – es un Estado joven y siempre ha tenido un lugar especial en el corazón de los Papas, que desde el principio han expresado su solidaridad con su pueblo, han tratado de acompañarlo en la superación de las adversidades iniciales y lo han apoyado en la exigente tarea de construir y hacer crecer la Nación”.
Promover los valores espirituales
En este sentido, el Papa Francisco espera que, “las buenas relaciones entre la Santa Sede y Bangladesh sigan floreciendo”. Además, el Pontífice confía en que, el clima cada vez más favorable de encuentro y de diálogo interreligioso, que ha experimentado durante su Visita, “continúe permitiendo a los creyentes expresar libremente sus convicciones más profundas sobre el sentido y la finalidad de la vida, y contribuya así a promover los valores espirituales que son el fundamento seguro de una sociedad pacífica y justa”.
Trabajar por la paz y la prosperidad de esta noble nación
Finalmente, al conmemorar el quincuagésimo aniversario de independencia de este país asiático, el Santo Padre renueva su firme convicción de que el futuro de la democracia y la salud de la vida política de Bangladesh están esencialmente ligados a sus ideales fundacionales y a la herencia de diálogo sincero y de respeto a la legítima diversidad que ustedes han tratado de alcanzar en estos años”. Por ello, como amigo de Bangladesh, el Papa Francisco anima a todos, especialmente a la generación más joven, “a renovar sus esfuerzos para trabajar por la paz y la prosperidad de la noble nación que representan”. Y les pide a todos que continúen con su compromiso de generosidad y ayuda humanitaria a los refugiados, los más pobres, los desfavorecidos y los que no tienen voz.