El consejero de Sanidad ha participado en la inauguración del XXXV Congreso Nacional de Trasplantes.
La Oficina Regional de Coordinación de Trasplantes de la Comunidad de Madrid organiza el XXXV Congreso Nacional de Trasplantes, por primera vez, de forma telemática.
Durante el Estado de alarma, se ampliaron en la Comunidad las pruebas de detección de coronavirus para evitar posibles contagios cruzados en el proceso de trasplante.
No se ha detectado ninguna transmisión de SARS CoV-2 entre donante y receptor en la región.
Desde el 1 de enero y hasta el inicio de la pandemia la Comunidad incrementó sus tasas de donación y trasplante un 33% respecto al mismo período de 2016.
23 de noviembre de 2020.- La Comunidad de Madrid, a través de la Oficina Regional de Coordinación de Trasplantes, es la encargada de organizar el trigésimo quinto Congreso Nacional de Coordinadores de Trasplantes, que por primera vez y debido a las restricciones de aforos y movimientos por el coronavirus, se realiza de forma telemática.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz-Escudero, ha participado hoy en la inauguración destacando el importante papel de todos y cada uno de los profesionales, tanto sanitarios, como no sanitarios, que participan en todo el proceso que implica el trasplante de órganos.
Profesionales que han permitido que la Comunidad de Madrid, desde el inicio del Estado de alarma y hasta el proceso de desescalada, haya sido la segunda Comunidad más trasplantadora, manteniendo la actividad de trasplantes incluso durante los momentos más complejos de la pandemia producida por el coronavirus.
Los trasplantes realizados durante los momentos más complejos se han hecho, como siempre en estos casos, siguiendo los criterios de riesgo beneficio, y tras un estudio completo de los donantes. La Oficina Regional de Coordinación de Trasplantes realizó un protocolo específico con las necesidades “a más” de pruebas a realizar para evitar los posibles contagios de COVID-19 en los procesos de trasplante de órganos.
En base a este protocolo, se estableció un grupo de trabajo por parte de la Organización Nacional de Trasplantes -ONT- en el que participaron cuatro oficinas regionales de coordinación de trasplantes, entre ellas la Comunidad de Madrid, y que fijó los criterios de inclusión y exclusión para evitar la transmisión del SARS Cov2 entre donante y receptor.
Encuesta epidemiológica
La Oficina Regional de Trasplantes de la Comunidad de Madrid, debido a la severidad de la afectación por la pandemia, además completó este protocolo con una encuesta epidemiológica a la donación, dos PCR, una en vía aérea superior y otra inferior en las 72 horas previas a la donación, y la realización de un scanner o radiología de alta resolución, al menos en los trasplantes de pulmón, corazón e intestino. Un plan de contingencia específico con el objetivo de mantener la bioseguridad.
Estas medidas han permitido que, en ninguno de los trasplantes realizados, siendo la Comunidad de Madrid una de las más afectadas, se haya producido ninguna transmisión de COVID-19 entre donante y receptor desde el inicio de la pandemia. Y siendo La Comunidad de Madrid la segunda comunidad de España en número de órganos implantados durante el Estado de alarma.
La Comunidad de Madrid se ha mantenido entre las regiones más activas por número de trasplantes realizados. Desde el inicio de la pandemia la actividad de donación y trasplante ha disminuido comparativamente respecto a cualquier período del año anterior, incluso algunas comunidades llegaron a parar, o casi parar sus programas de trasplante, mientras Madrid los mantenía para atender a los pacientes más graves en lista de espera, estando entre las primeras por actividad global.
Inicio del año con incremento de trasplantes
Del 1 de enero al 13 de marzo de 2020 (considerada como fecha de inicio de la pandemia), la Comunidad de Madrid mantenía una tendencia al alza del número de trasplantes, con 197 casos entre los tipos renal, hepático, cardíaco, pulmonar, pancreático e intestinal. Cifra considerablemente mayor que en el mismo período de 2019, con 186 trasplantes, y muy superior a la registrada en 2016, con 132 casos. Lo que indica un incremento del 49% en ese período en 2020 respecto de 2016.
Desde el inicio de la pandemia, la actividad de donación y trasplante ha disminuido comparativamente respecto a cualquier período del año anterior, si bien los protocolos y plan de contingencia establecido permitieron que los hospitales con programa de trasplante pudieran mantener las recomendaciones y continuar con la actividad lo más próxima a la normalidad.
Se han minimizado los desplazamientos de equipos para evitar la posible transmisión del virus, y las extracciones han sido realizadas por equipos de los hospitales en los que se producía la donación. Además, se ha mantenido el trasplante de tejidos dentro de las posibilidades, siendo el hospital Clínico San Carlos el centro de referencia para mantener esta actividad.
Según ha ido evolucionando la pandemia y se han implantado circuitos seguros y el plan de contingencia específica en trasplantes, gracias al esfuerzo del personal sanitario que trabaja en estos programas, de manera progresiva y según avanzan los meses, la actividad trasplantadora se va normalizando en la Comunidad de Madrid.
Donación de médula ósea
La actividad de donación de médula ósea durante los meses de mayo, junio y julio de 2020 han superado la de esos mismos meses en el año 2019. De hecho, la cifra total de donaciones de médula ósea en la Comunidad de Madrid desde el 1 de enero al 1 de septiembre de 2020 se ha reducido tan sólo en un 5% respecto al año anterior.
Además, médicos del Hospital Universitario La Paz, a través de una técnica innovadora, coordinada desde las oficinas Regional y nacional de trasplantes, han llevado a cabo el primer trasplante multivisceral y de progenitores hematopoyéticos en el mundo, a un menor de 15 años que padece displasia epitelial intestinal. El paciente había recibido dos trasplantes anteriormente, con rechazo, y con este nuevo trasplante multivisceral de estómago, intestino delgado y grueso, páncreas e hígado y de médula para sustituirle precursores hematopoyéticos sanos (médula ósea), se redujo el riesgo de rechazo y se consiguió un caso de éxito, pionero en el mundo.