La jefa del Gobierno de la Comunidad de Madrid interviene en el ‘Fórum Europa Tribuna Catalunya’ ante la sociedad civil catalana.
Impulsa esta iniciativa “ahora que el Brexit nos abre oportunidades con empresas asentadas en Londres que quieran permanecer en la UE”.
Advierte de que no hay que competir entre CCAA por inversiones extranjeras, sino con las grandes capitales europeas.
Reafirma su compromiso de aplicar en la Comunidad de Madrid “la mayor rebaja fiscal de la Historia” y compensar la presión fiscal del Gobierno central.
Aboga por “tender puentes” entre Madrid y Barcelona porque los intereses son los mismos que el resto de españoles y europeos.
“Soy una firme defensora de España como un país de ciudadanos libres e iguales ante la ley, y por eso la deriva del proceso independentista me preocupa”.
Defiende que va a Barcelona a hablar de “progreso y legalidad” y que los independentistas han “hundido” a Cataluña como potencia en Europa.
Díaz Ayuso destaca que la Comunidad de Madrid “quiere crecer junto a Cataluña” y no a su costa porque “juntos somos más fuertes”.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha propuesto en Barcelona “construir de forma conjunta una plataforma de empresas catalanas y madrileñas” para atraer inversión a España, “ahora que el Brexit nos abre oportunidades con todas las empresas asentadas en Londres que quieran permanecer en la UE”.
La nueva iniciativa contará con el respaldo y el impulso del Gobierno de la Comunidad de Madrid. Su objetivo pasa también por generar “prosperidad, empleo y oportunidades para todos los españoles”. Díaz Ayuso ha remarcado que la Comunidad de Madrid desecha “crecer a costa de Cataluña”, sino que quiere hacerlo “junto a Cataluña, porque juntos somos más fuertes”.
“Ni Madrid ni Cataluña debemos competir con otras regiones españolas para atraer inversión extranjera y generar empleo -ha subrayado Díaz Ayuso-, sino con las grandes capitales europeas”. ”Mientras el Brexit nos dice que España debe espabilar –ha avisado-, los políticos independentistas se miran el ombligo”. Así, ha explicado que “desde el ámbito regional debemos trabajar para construir la España próspera que nos ha llevado a ser una de las potencias económicas más importantes del mundo”.
Díaz Ayuso ha intervenido en el ‘Fórum Europa Tribuna Catalunya’, organizado por Nueva Economía Fórum, donde ha sido presentada por la portavoz del Grupo parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, Cayetana Álvarez de Toledo. La presidenta madrileña ha afirmado en este foro que el deber de los políticos es poner en marcha “las condiciones suficientes para que los empresarios creen empleo”. Ante representantes de la sociedad civil catalana ha afirmado que “Cataluña es una fuente inagotable de talento y Madrid aspira a seguir atrayendo a los mejores en todos los ámbitos”, ha agregado.
“A los madrileños –ha recordado- no nos es ajeno lo que ocurre en Cataluña o en cualquier parte de la nación. Mostrarse ajenos o contrarios al devenir de España significa desconocer la realidad del mundo global. Aislarse en un mundo global implica crear un gueto sin futuro”.
“El estándar de Madrid es un modelo liberal que huye del agobio de la Administración. Es un modelo no nacionalista porque Madrid es una Comunidad abierta al mundo, y esa es la base de su éxito”. Y es también, a su juicio, “un modelo de éxito, tanto en lo económico como en lo social”.
Defensora de libres e iguales ante la Ley
Díaz Ayuso ha destacado su preocupación ante “la deriva del proceso independentista” en Cataluña y se ha mostrado “firme defensora de España como un país de ciudadanos libres e iguales ante la ley”. “No puedo estar contenta -ha afirmado- ante una situación que no solo resquebraja los principios liberales de nuestro orden constitucional, sino que va en contra de los derechos de los catalanes, especialmente los catalanes”. “Cataluña –ha proseguido- ha dejado de estar entre las primeras regiones europeas por culpa de los independentistas, que la han hundido”.
Para la presidenta madrileña “unirse a los independentistas es el peor error que ha cometido esa parte del empresariado catalán que se ha abandonado a sus consignas. Las empresas -ha detallado- no pueden vivir ni de subvenciones, ni de favores, ni mucho menos de consignas políticas contrarias a la razón”.
En este sentido, ha asegurado que en ningún caso serán los líderes independentistas “los que procuren el empleo a las nuevas generaciones de catalanes”. “Cataluña, afortunadamente, -ha enfatizado- es mucho más que el señor Torra, mucho más que el proceso independentista. Y ustedes lo saben mejor que yo”.
Así, ha calificado como “una declaración de principios que nos alarma como demócratas” que el presidente de la Generalitat de Cataluña haya manifestado, recientemente, que “la no colaboración con la justicia es una obligación moral”. A su juicio, estas declaraciones “no parecen la mejor forma de atraer inversión”, ya que una “afirmación de ese calado no es inocua: tiene consecuencias”.
En uno de sus primeros actos como presidenta de la Comunidad de Madrid, ha alertado de que es “consciente de que, una vez más, sectores independentistas convertirán la Diada en un ataque al resto de España”. En esta línea, ha defendido la validez del Estado Autonómico como forma de organización política de España, ya que ha sido la que ha logrado avances en los principales servicios públicos, desde la Sanidad y la Educación al Medio Ambiente o la Dependencia. No obstante, ha admitido que “hay cosas que se puede mejorar y corregir”.
Díaz Ayuso ha declarado que la Comunidad de Madrid “no elude la responsabilidad compartida” junto con Cataluña de “seguir liderando una España europeísta, de personas libre e iguales”. Se trata, ha precisado, de lograr un país “en el que tanto Cataluña como Madrid sigamos siendo locomotora de prosperidad y mejora de las condiciones de vida de nuestros ciudadanos”.
Tender puentes con Cataluña
La jefa del Ejecutivo regional madrileño, “ante las palabras del presidente de la Generalitat pidiendo independencia e ilegalidad”, ha expresado su deseo de “conciliación y tender puentes entre los intereses de Cataluña y los de la Comunidad de Madrid”. “Yo vengo a Cataluña a hablar de progreso y legalidad”, ha señalado durante su intervención bajo el título ‘Comunidad de Madrid y Cataluña, un proyecto común para la España del siglo XXI’.
Además, ha afirmado en Barcelona que los madrileños se sienten en Cataluña como en casa: “Y estoy segura de que ustedes tienen la misma sensación cuando visitan Madrid”, porque la ciudad condal “y esta tierra catalana es también parte de mi identidad y de la de todos los españoles. Porque todos sentimos como propios los éxitos de Cataluña”.
Díaz Ayuso ha presentado a la región madrileña como “un lugar estratégico para el libre desarrollo de la actividad empresarial”. En este sentido, ha detallado cómo la Comunidad de Madrid crea 1 de cada 4 empresas y 1 de cada 5 empleos nuevos en España durante el último año. A ello se suma que en 2018 recibió hasta el 85% del total de la inversión extranjera en España y tuvo un crecimiento económico del 3,3% en el segundo trimestre de 2019. La tasa de paro madrileña está hasta 3,5 puntos por debajo de la media española.
“Entre Madrid y Barcelona generamos casi el 40% de la riqueza de España. Tenemos una responsabilidad compartida a la hora de dar respuestas políticas a la altura de las circunstancias desde el ámbito autonómico”, ha aseverado.
Rebaja fiscal histórica en la Comunidad de Madrid
La presidenta Díaz Ayuso ha presentado a la Comunidad de Madrid ante el ‘Fórum Europa Tribuna Catalunya’ como “una opción diferente a la del inmovilismo y la inestabilidad política” de un Gobierno central “incapaz” de sacar adelante pactos, cumplir con la dotación económica de las comunidades autónomas, afrontar la desaceleración económica y que aplica “subidas de impuestos, aumento desmesurado de gasto público” y prohibiciones que “sólo restringen libertades”.
La jefa del Gabinete madrileño ha compartido ante el empresariado catalán el mismo compromiso que ha realizado con los ciudadanos de la Comunidad de Madrid, como es “conseguir la mayor rebaja fiscal de la Historia” en la región; apostando por la atracción de inversiones y por el impulso económico privado, rebajando medio punto porcentual todos los tramos de IRPF. “Llevamos bajando impuestos 16 años consecutivos. Y mi programa fiscal aspira a seguir haciendo de Madrid una de las comunidades más atractivas de Europa”, creando riqueza, empleo y fortaleciendo los servicios públicos.
A este compromiso se suma el de contrapesar la presión fiscal del Gobierno socialista: “Cada vez que el Gobierno central decida incrementar algún impuesto, nosotros trataremos de compensarlo con las herramientas que tenemos a nuestra disposición a nivel autonómico. Porque sabemos que subir los impuestos, en realidad, es incrementar la presión fiscal a la clase media y que descienda el nivel de vida”.
Mientras, -continuó- Cataluña es la región con mayor presión fiscal y la que más tributos propios tiene y la Generalitat advirtió la semana pasada “de una subida adicional de IRPF, impuestos de sucesiones y de donaciones” o nuevas figuras impositivas con una “estrategia de marketing” que los etiqueta como ‘tributos verdes’.
Díaz Ayuso ha defendido que la Comunidad de Madrid es la autonomía que mejor se ajusta a los proyectos empresariales y a la vida de los empleados, donde también priman activos intangibles como son la estabilidad política e institucional -presupuestos aprobados durante la pasada legislatura-; seguridad jurídica, ya que el Gobierno madrileño no “improvisa a golpe de titular”; y “una política basada en el trabajo diario y en la responsabilidad” con medidas “que contribuyen a aumentar la libertad individual y empresarial”.
Hacer frente a la desaceleración
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha admitido también su “preocupación” ante la desaceleración económica en Europa, “con Italia y Alemania acercándose peligrosamente a la recesión técnica” y mientras se mantienen los riesgos que acarrea la salida del Reino Unido de la Unión Europea”. “Una preocupación que comparto y que debemos combatir desde cualquier ámbito político” dado que “España no es ajena a este fenómeno mundial”.
Así, ha advertido que mantenerse “impasibles ante esta situación, o volver a políticas que ya se han demostrado fallidas, puede provocar un retorno a la España de la crisis que todos pretendemos evitar”. “Sencillamente, no podemos permitírnoslo”, ha dicho en su intervención.
En esta línea, ha advertido de que ya se están viendo “reacciones defensivas de muchos organismos monetarios y supranacionales, lo cual es solo un síntoma más de preocupación por la evolución económica”.
Discurso completo de Isabel Díaz Ayuso
Buenos días a todos,
En primer lugar, quiero agradecer a Nueva Economía Forum la organización de este desayuno informativo en Barcelona y a Cayetana Álvarez de Toledo por su presentación. Cayetana es una de las mejores parlamentarias que nunca ha conocido España y es un honor defender sus mismos principios, sus mismas ideas, y actuar con su misma valentía.
Este es uno de mis primeros actos como presidenta de la Comunidad de Madrid, la casa de todos los españoles. Quien aspira a presidir una comunidad autónoma ha de ser consecuente con el compromiso que adquiere con el resto de España. A los madrileños no nos es ajeno lo que ocurre en Cataluña o en cualquier otra parte de la nación. Mostrase ajenos o contrarios al devenir de España significa desconocer la realidad del mundo global. Aislarse en un mundo global implica crear un gueto sin futuro.
Hoy nos hemos reunido aquí porque me gustaría conversar sobre la Comunidad de Madrid, que tengo el honor de presidir, un lugar estratégico para el libre desarrollo de la actividad empresarial.
Como todos ustedes saben, soy una firme defensora de España como un país de ciudadanos libres e iguales ante la ley, y por eso la deriva del proceso independentista me preocupa.
No puedo estar contenta ante una situación que no solo resquebraja los principios liberales de nuestro orden constitucional, sino que va en contra de los derechos de los españoles, especialmente de los catalanes.
Y digo más: unirse a los independentistas es el peor error que ha cometido esa parte del empresariado catalán que se ha abandonado a sus consignas. Las empresas no pueden vivir ni de subvenciones, ni de favores, ni mucho menos de consignas políticas contrarias a la razón.
Cataluña ha dejado de estar entre las primeras regiones europeas por culpa de los independentistas, que la han hundido.
Frente a las palabras del presidente de la Generalidad, la semana pasada, en Madrid, proclamando independencia e ilegalidad, me gustaría hoy hacerles llegar a todos ustedes estas palabras de conciliación y tender puentes entre los intereses de Cataluña y los de la Comunidad de Madrid. Son los intereses de los mismos ciudadanos españoles y europeos.
Cuando el presidente de la Generalidad proclamó que “la no cooperación con la justicia es una obligación moral”, supone una declaración de principios que nos alarma como demócratas. Una afirmación de ese calado no es inocua: tiene consecuencias. Luego, no parece la mejor forma de atraer inversión. No serán los líderes independentistas los que procuren el empleo a las nuevas generaciones de catalanes.
Cataluña, afortunadamente, es mucho más que el señor Torra; mucho más que el proceso independentista. Cataluña, y ustedes lo saben mejor que yo, es una fuente inagotable de talento. Y Madrid aspira a seguir atrayendo a los mejores en todos los ámbitos: en la arquitectura, en las vanguardias culturales, en el deporte, en la música, en la gastronomía, y, por supuesto, en la empresa.
Cataluña lleva décadas acogiendo a españoles de todas las regiones. Y en toda España persiste, a pesar de lo acontecido en los últimos años, la imagen de una Cataluña emprendedora, trabajadora y próspera. Y de una Barcelona que sigue recibiendo todos los años a centenares de miles de madrileños.
Aquí nos sentimos en casa y estoy segura de que ustedes tienen la misma sensación cuando visitan Madrid. Esta ciudad y esta tierra catalana es también parte de mi identidad y de la de todos los españoles. Porque todos sentimos como propios los éxitos de Cataluña.
Gaudí, el Modernismo, la Sagrada Familia, el Románico, las grandes empresas que han conquistado España y el mundo, los inolvidables Juegos Olímpicos del verano de 1992, la literatura catalana -en catalán y en castellano-, la gastronomía de reconocido prestigio internacional, las escuelas de negocios. En definitiva, muchas y muy importantes virtudes que en Madrid conocemos y reconocemos.
Por eso estoy aquí, en uno de mis primeros actos, apenas un mes después de haber tomado posesión de mi cargo, consciente de que, una vez más, sectores independentistas convertirán la Diada en un ataque al resto de España.
Creo que el Estado Autonómico es una buena forma de organización política para España. Los avances en Educación, en Sanidad, en Dependencia, en el cuidado del Medio Ambiente o del Patrimonio Histórico, se han logrado, en buena medida, por la existencia de unas administraciones próximas.
Cuarenta años de experiencia histórica del Estado de las Autonomías nos permiten hacer una evaluación, que debe de ser serena y sin prejuicios, sin miedo a reconocer que hay cosas que se pueden mejorar y corregir.
Madrid no quiere crecer a costa de Cataluña. Quiero que crezcamos junto a Cataluña. Porque juntos somos más fuertes.
Del mismo modo que el resto de España bebe de Cataluña, vengo a hablarles del modelo de Madrid, que ha resultado claramente un modelo de éxito, tanto en lo económico como en lo social.
El estándar de Madrid es un modelo liberal que huye del agobio de la Administración. Es un modelo no nacionalista porque Madrid es una Comunidad abierta al mundo, y esa es la base de su éxito
Madrid es una Comunidad abierta a la inversión y a la actividad privada, bajo el absoluto respeto a:
La seguridad jurídica
La estabilidad económica, institucional y política
Respeto al mandato de la ley
Al ejercicio de sus derechos y responsabilidades como empresarios
Y respeto, por supuesto, a la Constitución como máxima expresión de una democracia liberal de ciudadanos libres e iguales
El enfrentamiento de Madrid al resto de España no nos hubiera conducido a nada. Por eso, el Partido Popular nunca ha hecho regionalismo ni populismo en Madrid. Y eso nos ha ido muy bien.
Vivimos tiempos complejos, y no solo en política. La desaceleración económica en Europa es un hecho, con Italia y Alemania acercándose peligrosamente a la recesión técnica.
Y, tras la evolución a la baja de China en los últimos meses, Estados Unidos también empieza a presentar síntomas de fin de ciclo. Por no hablar de los riesgos que entraña la salida de Reino Unido de la Unión Europea, sea cual sea su forma final.
Como consecuencia, ya estamos viendo reacciones defensivas de muchos organismos monetarios y supranacionales, lo cual es solo un síntoma más de preocupación por la evolución económica. Una preocupación que comparto y que debemos combatir desde cualquier ámbito político.
España no es ajena a este fenómeno mundial.
La crisis que viene tiene un carácter industrial, algo que ya vimos en el año 2008, y que se refleja en el desplome de las matriculaciones de vehículos y en la debilidad de la demanda de electricidad, entre otros. Se avecinan tiempos de zozobra, en Cataluña y en toda España, y esta vez sí debemos estar preparados. Mantenernos impasibles ante esta situación, o volver a políticas que ya se han demostrado fallidas, puede provocar un retorno a la España de la crisis que todos pretendemos evitar.
Sencillamente no podemos permitírnoslo. La tasa de paro desestacionalizada ya se ha incrementado en 0,5 puntos porcentuales en la última EPA. Los últimos datos de paro registrado ilustran el peor mes de agosto desde 2009. España llevaba sin sufrir un incremento del paro desde el año 2013.
Entre Madrid y Barcelona generamos casi el 40% de la riqueza de España. Tenemos una responsabilidad compartida a la hora de dar respuestas políticas a la altura de las circunstancias desde el ámbito autonómico, por ser el más cercano a ustedes, empresarios, y a los ciudadanos en general.
En este sentido debemos ser conscientes de la responsabilidad que tenemos entre manos, y afrontar la situación aplicando las medidas de política económica y fiscal que se han demostrado efectivas.
Nosotros presentamos una opción diferente a la del inmovilismo y la inestabilidad política creada por un gobierno central que:
Es incapaz de sacar adelante pactos de futuro para arrancar la legislatura y afrontar las reformas que necesita el país para gestionar la desaceleración.
Es incapaz de cumplir con la dotación económica de las Comunidades Autónomas, lo que perjudica a los servicios públicos y dificulta el pago a proveedores.
Es incapaz de afrontar la desaceleración económica sin acudir a recetas que se han demostrado fallidas, como las subidas de impuestos, el aumento desmesurado del gasto público, y reglamentaciones y prohibiciones que, en último término, sólo restringen libertades.
Algo, por cierto, que intentan hacerle a ustedes. Cataluña no solo es la región con mayor presión fiscal y la que más tributos propios tiene. Además, la semana pasada el gobierno catalán ya advirtió de una subida adicional en IRPF, impuestos de sucesiones y donaciones, e incluso el establecimiento de nuevas figuras impositivas, cuya última estrategia de marketing pasa por etiquetarlos como “tributos verdes”.
Hoy tengo el honor de presentarles una región que evoluciona favorablemente, incluso en condiciones de incertidumbre.
La Comunidad de Madrid ha crecido un 3,3% en el segundo trimestre de 2019. Esto supone 1,1 puntos porcentuales más que la media nacional. Llevamos con esta tendencia los últimos 15 trimestres.
La Comunidad de Madrid crea 1 de cada 4 empresas y 1 de cada 5 empleos nuevos en España durante el último año.
Desde la salida de la crisis hemos sido capaces de generar 1 de cada 5 euros de crecimiento del territorio español.
Mantenemos una tasa de paro 3,5 puntos porcentuales por debajo de la media española y casi el doble de contratos indefinidos.
Madrid es líder en gasto en innovación tecnológica. (5.127,8 millones de euros, el 37% del total de España)
La Comunidad de Madrid recibió en 2018 el 85% de la inversión extranjera con destino España.
En definitiva, una región cuyos dirigentes se han centrado en la creación de empleos y oportunidades y orientada al crecimiento económico, a la innovación y al progreso, que garantiza el bienestar a sus ciudadanos y cumple con los compromisos que asume. Y que siempre mira a Cataluña, su hermana.
Cataluña y Madrid somos dos regiones de las que debemos sentirnos orgullosos todos los españoles. Estoy aquí para construir la marca España. La que compartimos ustedes y nosotros.
Vivimos en un mundo globalizado, en el que los costes de transporte evolucionan a la baja y las barreras normativas e incluso arancelarias cada vez importan menos. Por eso, las decisiones de localización empresarial cada vez tienen más que ver con la generación de valor adicional para sus productos, como la seguridad, los gobiernos estables y las libertades.
Ni Madrid ni Cataluña debemos competir con otras regiones españolas para atraer inversión extranjera y generar empleo, sino con las grandes capitales europeas. Tenemos que ser conscientes de que cuando un empresario toma sus decisiones de localización tiene en cuenta países como Irlanda o Reino Unido, cuya presión fiscal está hasta casi 9 puntos por debajo de la española.
Por lo tanto, desde el ámbito regional debemos trabajar para construir la España próspera que nos ha llevado a ser una de las potencias económicas más importantes del mundo.
Les propongo hoy aquí construir, de forma conjunta, una plataforma de empresas catalanas y madrileñas cuyo objetivo trabajar juntas para atraer inversión, ahora que el Brexit nos abre oportunidades con todas las empresas asentadas en Londres que quieran permanecer en la UE. Y con ello prosperidad, empleo y oportunidades para todos los españoles.
Y mientras el Brexit nos dice que España debe espabilar, los políticos independentistas se miran el ombligo.
El presidente Torra, como ya dije antes, fue a Madrid la semana pasada a hablar de independencia, ilegalidad y ruptura: por contra, yo vengo a Cataluña a hablar de progreso y legalidad.
La fórmula es la libertad. Libertad para que cada persona lleve a cabo la vida que desee. Libertad para que ustedes, los empresarios, saquen adelante sus proyectos con una administración flexible y simplificada; esto es, ofrecer ventajas competitivas para atraer a España a las empresas más punteras del mundo.
Los políticos estamos para crear las condiciones suficientes para que los empresarios creen empleo. Deberíamos haberlo aprendido tras la grave crisis que sufrió el país durante el gobierno socialista de Zapatero, y cuyas secuelas han llegado hasta tiempos recientes.
Son ustedes, los empresarios, los que más interés tienen en crear empleo. Empleo de calidad, capaz de satisfacer las demandas de sus clientes y de generar el mayor valor añadido posible. Son ustedes los que mejor conocen sus mercados, sus necesidades y sus riesgos.
En Madrid así lo hemos entendido, por eso es una región llena de activos intangibles, pero muy reales y necesarios, que definen la capacidad de crecimiento y progreso de nuestra sociedad.
Me refiero a la estabilidad política e institucional que nos ha permitido mantener los presupuestos aprobados de forma anual durante toda la legislatura, gracias al diálogo y al entendimiento con otros grupos de la Cámara. En 2020 también tendremos cuentas públicas.
Me refiero también a valores como la seguridad jurídica y la certidumbre económica con la que se encuentran los inversores en Madrid.
Una política basada en el trabajo diario y en la responsabilidad que ustedes, como empresarios, estoy segura conocen a la perfección porque forma parte de cualquier “libreto” que se asocie con el éxito.
En definitiva, una política que ha apostado de forma decidida y sostenida en el tiempo por medidas que contribuyen a aumentar la libertad individual y empresarial. Medidas que ayudan a crear riqueza y empleo, con las que garantizar la sostenibilidad de la Administración y los servicios públicos de calidad.
Mi plan de gobierno para los próximos cuatro años va a continuar en la misma línea. Las economías líderes a nivel mundial no solo están bajando impuestos, sino que también están permitiendo un mayor grado de libertad para contrarrestar los efectos de la desaceleración económica.
Madrid aspira a mantenerse entre los mejores. Por eso, aprendemos de ellos y tratamos de mejorar sus modelos. Hoy, aquí, les avanzo alguno de mis compromisos con los ciudadanos de Madrid:
Conseguir la mayor rebaja fiscal de la Historia de la Comunidad de Madrid. Apostaremos por la atracción de inversiones y por el impulso económico privado, rebajando medio punto porcentual todos los tramos de IRPF.
También nos hemos comprometido a compensar, en la medida de lo posible, la presión fiscal del Gobierno socialista. De esta manera, cada vez que el Gobierno Central decida incrementar algún impuesto, nosotros trataremos de compensarlo con las herramientas que tenemos a nuestra disposición a nivel autonómico. Porque sabemos que subir los impuestos, en realidad, es incrementar la presión fiscal a la clase media y que descienda el nivel de vida.
Y quiero ir más allá. Yo sé que la localización empresarial depende no sólo de la política fiscal, sino también de otros retos que voy a abordar durante mi legislatura, como son:
La ventanilla única empresarial, que integrará todas las necesidades que tiene el empresario en su relación con las administraciones públicas.
Un proceso de digitalización que permita a la administración estar a la altura de las mejores empresas tecnológicas del mundo, en cuanto a la eficiencia en la gestión.
Mejorar el acceso a una vivienda, especialmente por parte del segmento más joven. Para ello, en Madrid se construirán 25.000 viviendas a través del Plan Vive Madrid con alquileres desde los 450 euros y mejoraremos las condiciones de oferta para que el mercado sea capaz de atender la necesidad de vivienda en la región. Además, desarrollaremos Madrid Nuevo Norte, que supondrá el mayor proyecto urbanístico de Europa en los próximos años con la creación de más de 240.000 empleos, que además permitirá que empresarios catalanes puedan invertir aquí y en Madrid.
También, recuperaremos las deducciones al alquiler y a la compra de vivienda como parte de nuestro plan de emancipación.
La apuesta decidida por las políticas de conciliación del trabajo con la vida familiar, abordando el problema desde las necesidades reales de los ciudadanos. Impulsaremos soluciones como el teletrabajo y ofreceremos un sistema de ayudas a empresas con planes de conciliación laboral. Quiero una región en la que se premie el mérito y la consecución de objetivos, no el número de horas en la oficina, trabajar por objetivos.
En definitiva, pretendo construir una comunidad en la que no sólo cualquier empresario pueda desarrollar su proyecto con las mínimas trabas burocráticas y normativas posibles, en la que también puedan atraer y retener el talento más preparado, capaz de aportar un valor diferencial a sus compañías.
Concretamente, aspiro a una región abierta al capitalismo, con un ojo siempre puesto en nuestros ciudadanos. Humanizada, que proteja a la infancia, de herramientas a los jóvenes, atraiga talento y se ocupe de los mayores.
Este es el modelo de éxito en Madrid y en cualquier parte del mundo donde se ha aplicado.
Creo en Comunidad de Madrid libre y abierta a la innovación tecnológica, que no elude la responsabilidad compartida que tenemos, junto con Cataluña, de seguir liderando una España europeísta, de personas libres e iguales.
El mismo proyecto que ha traído siempre a nuestro país los mayores niveles de progreso.
Quiero una España en el que tanto Cataluña como Madrid sigamos siendo locomotora de prosperidad y mejora de las condiciones de vida de nuestros ciudadanos.
Trabajaré para que Madrid siga siendo una de las regiones más competitivas del mundo, gracias a la fiscalidad y el respeto a las libertades individuales como ejes de prosperidad.
De hecho, ya llevamos bajando impuestos durante 16 años consecutivos.
Y mi programa fiscal aspira a seguir haciendo de Madrid una de las comunidades más atractivas de Europa. Nuestra región no sólo creará riqueza y puestos de trabajo, sino que también fortalecerá los servicios públicos que nos demandan los ciudadanos. Y que colabore con los autónomos y empresarios de toda España para crecer juntos.
En conclusión, el modelo de Madrid que les he descrito lleva dando resultados ya muchos años. Nada de lo que he contado anteriormente es fruto de la casualidad, sino de un trabajo duro y sostenido que nos posiciona como un lugar donde invertir y desarrollar la actividad empresarial de éxito en libertad.
Donde los protagonistas no somos los políticos sino las personas, que ponen en riesgo el patrimonio de sus hijos para crear empleos.
Y, en este punto, les digo que quien aspira a gobernar una comunidad autónoma como Madrid adquiere un compromiso para gobernar con lealtad y fraternidad con todos los españoles vivan donde vivan.
Estaremos siempre con vosotros y desde la creatividad y la ilusión por este proyecto compartido que es España, haremos todo lo que este en nuestra mano para tejer alianzas, diálogo y progreso para nuestros ciudadanos.
Contad con Madrid como el mejor aliado.