Hasta ahora se cuentan 62 víctimas.
(ZENIT).- El pasado jueves, 25 de junio de 2019, se produjo un gravísimo naufragio frente a las costas de Joms, en Libia, ante el cual el Papa renovó ayer, 28 de julio, en el Ángelus, un “llamamiento urgente para que la comunidad internacional actúe con rapidez y decisión para evitar que vuelvan a ocurrir tales tragedias y para garantizar la seguridad y la dignidad de todos”.
Según informó Médicos Sin Fronteras (MSF), el número de personas desaparecidas supera el centenar y es probable que gran parte de ellas se hayan ahogado. Ayer domingo el número de cuerpos sin vida rescatados ascendía a 62, de acuerdo a L’Osservatore Romano.
MSF indica que los supervivientes fueron rescatados por pescadores y devueltos a Joms y que sus equipos proporcionaron servicios médicos a dos grupos de unas 135 personas, estabilizando los casos más urgentes y derivando a siete de ellas para recibir atención médica vital.
Otros llamamientos a la comunidad internacional
Filippo Grandi, alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), manifestó que “la peor tragedia del año en el Mediterráneo acaba de suceder” y añadió que “restablecer el rescate en el mar, terminar con la detención de refugiados y migrantes en Libia, incrementar las vías seguras para salir de Libia tienen que tener lugar ahora, antes de que sea demasiado tarde para muchas más personas desesperadas”.
Desde ACNUR se produjo también un llamado con carácter inminente a todos los estados para que ofrezcan “ayuda adicional, incluso a través de plazas de reasentamiento y otras vías legales, para que la gente más vulnerable o en situación de riesgo pueda salir de Libia” algo que señala tan importante como el rescate de las personas en el mar.
Por otra parte, para Raffaela Milano, directora de programas Italia-Europa de Save the Children resulta “absolutamente inaceptable que Europa permanezca inerme ante la tragedia que sigue teniendo lugar en sus puertas” y subraya que “salvar vidas debe ser la principal preocupación de los Estados miembros de la Unión Europea”.
Igualmente, considera fundamental que “la comunidad internacional, y sobre todo Europa, redoble sus esfuerzos para crear rutas de acceso seguras desde las zonas de crisis o de tránsito, para evitar que decenas de miles de personas se vean obligadas a seguir dependiendo de los traficantes, poniendo sus vidas en grave peligro, para cruzar el mar Mediterráneo (…)”.
LARISSA I. LÓPEZ
Imagen: Migrante Frente Al Mar