Entre los trabajos habituales de la Unidad de Medio Ambiente de la Policía local está el patrullaje de caminos y zonas rurales que permite detectar y solucionar circunstancias que pudieran generar peligro.
Un ejemplo del trabajo eficaz de esta unidad policial es que, en los últimos años, los agentes han encontrado diversos pozos, como consta en los informes desde 2010, y han procedido a tomar las medidas necesarias para que no constituyeran ningún riesgo.
La unidad de Medio Ambiente de la Policía Local, en colaboración con las Concejalías de Mantenimiento de la Ciudad y Medio Ambiente, continúa en su patrullaje con la tarea de localizar, revisar y señalizar, en su caso, de los pozos u otras situaciones que puedan requerir su actuación.
Además, miembros de la plantilla de mantenimiento de la ciudad vallan y refuerzan el cercado de la finca y marcan la zona peligrosa para que quede claro que no se permite el acercamiento a dichas zonas.
La colaboración ciudadana siempre es importante en la labor policial por lo que, si algún vecino detecta alguna situación de riesgo, es conveniente que se lo comunique a los agentes.