El Papa ha dedicado la audiencia general de este miércoles a rememorar su reciente participación en la Jornada Mundial de la Juventud y ha lamentado el «invierno demográfico que estamos viviendo en Europa» que contrasta con la imagen en Panamá de la gente alzando a los niños pequeños al paso del papamóvil
El Papa ha lamentado el «invierno demográfico que estamos viviendo en Europa» y que tanto contrasta con la conmovedora imagen de la que Francisco ha sido testigo durante la JMJ de Panamá: «la gente alzaba los niños pequeños en brazos al paso del papamóvil como si dijeran: “¡Mirad mi orgullo, aquí está mi futuro!” Los padres y madres estaban orgullosos de esos niños».
«Cuánta dignidad hay en este gesto y qué elocuente es para el invierno demográfico que estamos viviendo en Europa. El orgullo de esas familias son los niños, la seguridad para el futuro son los niños: el invierno demográfico sin niños es duro», ha señalado el Pontífice durante la audiencia general de este miércoles.
Banderas frente a los nacionalismos
Durante su intervención, dedicada a rememorar su reciente participación en la Jornada Mundial de la Juventud de Panamá, el Obispo de Roma también ha destacado «el desfile de banderas juntas, bailando en las manos de los jóvenes alegres», que contrastaba con «la triste tendencia de hoy hacia los nacionalismos que general conflicto».
El Santo Padre ha tildado este gesto como «un símbolo profético» de nuestro tiempo, al mismo tiempo que ha subrayado «el fermento de paz en el mundo» de los jóvenes cristianos –visibilizado en la encuentro de Panamá– frente a los nacionalismos que «alzan muros».
La Virgen, la influencer de Dios
De las celebraciones presididas en el país centroamericano, el Papa se ha centrado durante la audiencia en la liturgia penitencial celebrada en la cárcel de menores de Pacora y en la visita a la casa de acogida para enfermos de VIH, pero se ha detenido especialmente en el viacrucis, donde se denunció que «hay muchos jóvenes víctimas de diferentes formas de esclavitud y pobreza».
Por otro lado, Francisco ha recordado su llamamiento para que los jóvenes no se consideren «el mañana» porque son «el hoy de la Iglesia y del mundo» y a los adultos para que «las nuevas generaciones no carezcan de educación, trabajo, comunidad y familia».
Al final de la audiencia, Bergoglio ha rememorado sus palabras sobre María dirigida a los participantes de la JMJ. Para el Pontífice, la Virgen es «la persona que en su pequeñez ha influido en la historia del mundo más que ninguna otra. La llamamos la influencer de Dios».
J. C. de A.
Foto: AFP/Andreas Solaro