Tras encontrarse con un niño solo en un hospital, María José Gimeno se vio abocada a poner en marcha una asociación para el acompañamiento hospitalario de menores tutelados por la Administración. En enero se espera que Mamás en Acción desembarque en Madrid y, posteriormente, se extienda a toda España
Por la protección de datos –y por elemental delicadeza– María José Gimeno no puede ahondar para Alfa y Omega en las historias de los niños tutelados por la Administración a los que acompaña por distintos hospitales en Valencia, pero –advierte– algunas son «realmente duras».
Ella entró en contacto con esta realidad en 2013, de casualidad, cuando acudió con su hija a una revisión rutinaria. «Me encontré con un niño que estaba solo en la habitación. A mí me había costado mucho ser madre, fue mi sueño cumplido, y no entendía como alguien podía abandonar a su hijo en un hospital», confiesa Majo.
Pero para confirmar sus sospechas, o con la esperanza de que no fueran ciertas, Gimeno le preguntó a una enfermera por la soledad del pequeño. «La respuesta me encogió el alma: “No tiene padres, está tutelado por las autoridades y, en esta ocasión, nadie ha podido venir a acompañarle”».
La respuesta no convenció a María José, que una vez en casa, no podía dejar de pensar en aquel pequeño. «Cada vez que abrazaba a mi hija, pensaba en el niño solo del hospital», recuerda. A la mañana siguiente, después de no pegar ojo en toda la noche, Majo se fue de nuevo al centro médico:
—Oiga, mire, le cuento. Yo me enteré ayer de lo de este niño que está solo y no tengo paz desde entonces. ¿Puedo echar una mano?
—Sí, hace mucha falta.
—Y ¿qué puedo hacer? ¿Me quedo a dormir con él?
—No, mujer, por su cuenta no puede hacer nada. Tiene usted que pertenecer a algún colectivo.
—Pues dígame entonces a qué colectivo me apunto para acompañar al pequeño.
—Pues no lo sé, porque no hay ninguno.
Tras esta experiencia, María José Gimeno fundó, no sin tener que superar muchas trabas, la asociación Mamás en Acción. Hasta la fecha, cerca de 770 voluntarias han acompañado por diferentes hospitales a 72 menores valencianos, labor por la que han sido reconocidas esta Navidad con el premio ¡Buenos días, Javi y Mar!: Por un mundo mejor concedido por Cadena 100. «Yo no pretendía fundar nada, pero a cada amiga que le contaba mi experiencia se ofrecía para ayudarme. Al ver a tanta gente dispuesta a colaborar, pensé que igual, entre todas, podíamos hacer algo; y así nació la asociación», asegura su presidenta.
Cura sana, culito de rana
Curasana es el programa señero de la asociación. «Se trata de acompañar a los niños de los hogares sociales durante sus visitas al hospital. Muchas veces pasa que los técnicos de las residencias, por falta de personal, no se pueden permitir acompañar a un niño al hospital porque dejarían solos a los demás. Desde Mamás en Acción nos encargamos de acompañarles hasta el hospital y de hacer turnos en el centro si el niño se tuviera que quedar ingresado», explica Majo.
La asociación también cuenta con el programa Felicidades por el que celebran los cumpleaños de los niños de los hogares infantiles. «Nosotros nos encargamos de todo: de decorar, de preparar la merienda, traemos la tarta… Y luego limpiamos todo como si no hubiera pasado nadie por allí». Este programa «nos permite conocer a los niños previamente porque si se ponen malitos las que les vamos a acompañar al hospital somos nosotras», explica la presidenta. «En una ocasión, le pusimos una tarta delante a un niño de 12 años y no sabía que tenía que soplar porque nunca lo había hecho», recuerda.
Desde Mamás en Acción se lleva a cabo también el programa Madres en situaciones retadoras, dirigido a familias que están en una situación límite porque, de pronto, a un hijo le detectan una enfermedad terminal o crónica. «Los permisos para cuidar a un hijo en el hospital duran entre dos días y una semana. Si tienes que dejar de trabajar para cuidar a tu hijo, puedes perder los ingresos e incluso también a tu hijo. En esa situación, echamos una mano en el hospital para que los padres se puedan reincorporar a sus trabajos sin tener que dejar solo al niño», detalla María José Gimeno. Además, con estas familias en situaciones retadoras «compartimos El desván de Mamás, en el que recogemos y organizamos ropa, calzado y utensilios de puericultura de primera necesidad», como pañales, carros, cunas, mochilas….
Expansión por toda España
De momento, la labor de Mamás en Acción se circunscribe a la Comunidad Valenciana pero este mes desembarcarán en Madrid de la mano de la Fundación Botín y su programa Talento Solidario. «Al ser seleccionadas para el programa, les pedimos ayuda para expandirnos a Madrid. Nos están ayudando con toda la asesoría estratégica», subraya Majo.
Una vez asentadas en la capital, la idea es que el modelo se pueda replicar por toda España. «Actualmente, tenemos grupos de más de 100 voluntarios en 19 ciudades españolas que se están formando para poder llevar nuestra labor allí», concluye.
José Calderero de Aldecoa @jcalderero
Imagen: Voluntarios de Mamás en Acción
en algunas de las actividades que preparan
para los niños que atienden.
(Foto: Mamás en Acción)