El Patronato del Monte del Pilar ha puesto en marcha en las últimas semanas la campaña de prevención de la procesionaria con tratamientos naturales que paulatinamente sustituyen la aplicación de insecticidas químicos. El objetivo es conseguir a medio plazo el control de la misma de manera biológica al 100%.
La procesionaria es la plaga más importante de los pinares mediterráneos. Debe su nombre al modo en el que se desplazan las orugas, en grupo a modo de procesión. El Monte del Pilar de Majadahonda cuenta con 250 hectáreas de pino piñonero por lo que es prioritario adoptar medidas para evitar molestias a la población y a los animales domésticos.
En el otoño de 2016 se comenzó a compatibilizar, de forma experimental, productos que contienen materias activas menos agresivas que los insecticidas (Decis) y otras sustancias biológicas como el Bacillus Thuringiensis con el que este año se ha tratado el 90% de la superficie. También se han colocado trampas de feromonas para comprobar la evolución y la cantidad de los insectos que quedan atrapados en ellas.
Los datos obtenidos en estos dos últimos años revelan un número muy bajo de nidos, la mayoría localizados en los lindes del Monte del Pilar. El grado de infestación, según los parámetros de la Comunidad de Madrid, es de 0 y las colonias están muy diseminadas.
En la actualidad se realiza un seguimiento exhaustivo de los nidos detectados en el interior del Monte y en la Zona de Disuasión y los que resultan accesibles se eliminan de forma manual. Cuando no es posible está acción se colocan trampas alrededor de los troncos de los árboles afectados a modo de anillo que impedirán el desplazamiento de las orugas hasta el suelo.
Arreglos de caminos
Otras labores importantes que se están desarrollando en los meses de otoño en el Monte del Pilar son el arreglo de los caminos y la reanudación del proyecto de regeneración del arroyo de Valgrande.
El primero de los trabajos abarcará unos 5 km de sendas, incluidas las rutas más transitadas que se han deteriorado desde la última actuación. En cuanto al arroyo, se continuará con la limpieza selectiva que se paralizó en primavera para respetar el periodo de cría de las especies que viven en sus orillas.