El Cardenal habla sobre qué es necesario para proteger a los menores, la actual “crisis” y “rebelión”, Europa y el Sínodo
(ZENIT – Poznan, Polonia).- El Cardenal Marc Ouellet, Prefecto de la Congregación Vaticana para los Obispos, ha subrayado que se debe hacer mucho para combatir la “crisis” en la Iglesia, provocada por los abusos sexuales e incubrimientos, apuntando que esto implica una mejor coordinación entre los dicasterios pontificios y que las mujeres deberían tener un papel más relevante en la formación de sacerdotes.
En una entrevista con Zenit y con otros periodistas en Poznan, Polonia, durante la Asamblea Plenaria del CCEE (Consejo de Conferencias de Obispos Europeos), celebrada el 15 de septiembre 2018, el cardenal canadiense hizo esta observación contestando preguntas sobre la manera apropriada para prevenir o manejar estas situaciones en el futuro.
En la entrevista, el Prefecto del Vaticano de la Congregación para Obispos reafirmó la importancia de la responsabilidad y de recuperar credibilidad eficazmente, pero también del papel de los obispos en sostener la misión de la Iglesia, y como esto involucra no respaldar “ataques injustos” al Papa. También comentó que estamos viendo en este momento algo como una “rebelión”.
En la entrevista, el Cardenal Ouellet también habla del próximo Sínodo sobre los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional en el Vaticano y de por qué la solidaridad en Europa es importante no solo para el continente, sino para el mundo entero.
ZENIT (Deborah Castellano Lubov): ¿Por qué es necesario trabajar hacia la solidaridad en Europa para el propio funcionamiento del continente y para el mundo en general?
Cardenal Ouellet: Me alegra participar, al menos en parte, en el Consejo de las Conferencias de los Obispos Europeos. Me parece que esta reflexión ayuda a crear una cultura de solidaridad, a alentar el voluntariado y a reconocer también la contribución de la Iglesia en el voluntariado. La solidaridad es un valor cristiano fundamental que debemos desarrollar en nuestra comunidad, en las comunidades cristianas. Necesitan ser iluminadas por la caridad y ser abiertas a otras. Tienen que demostrar la fraternidad vivida, y esto es parte de la misión de la Iglesia. Pero, al mismo tiempo, tenemos que tener un horizonte ampliamente abierto, es decir, todas las otras personas que también forman parte de la gran familia humana, con un testimonio humano de solidaridad, voluntariado y ayuda mutua, en cuanto a la acogida.
ZENIT (Deborah Castellano Lubov): ¿Cómo va a ayudar Europa para ayudar a transmitir la fe a los jóvenes? pues parece que cada vez más y más están desinteresados en sus raíces cristianas. En este contexto, ¿qué espera usted del próximo Sínodo de los Obispos sobre los jóvenes?
Cardenal Ouellet: Gracias por esta pregunta. Obviamente, existe preocupación en la Iglesia por el futuro de la transmisión de la fe. Toda la reflexión en la Iglesia sobre la familia estaba dirigida hacia este objetivo. Ante todo, así como el Papa Francisco demuestra confianza en la juventud, creo que el Sínodo debe expresar ante todo la confianza de la Iglesia en los jóvenes. Esto es lo más fundamental. Tienen los recursos y hasta visiones y habilidades como “profetas,” y si se sienten respaldados, aquí está la Iglesia. Ese es el primer punto. Segundo punto. A mí me parece que debe haber una reflexión sobre la educación. La educación en la familia, en los colegios, en las universidades – concretamente educación, porque los jóvenes necesitan modelos, testigos, ánimo, pero también parámetros y corrección, para ir adelante. Estos son los dos puntos.
ZENIT (Deborah Castellano Lubov): El escándalo de la pedofilia en la Iglesia acapara las noticias en varios países. Los presidentes de las Conferencias Episcopales del mundo han sido llamados a Roma por el Papa, del 21-24 de febrero 2018 para una cumbre sobre la protección de menores y adultos vulnerables. La Iglesia ya ha hecho mucho para afrontar este azote, pero parece que nunca es suficiente. En su opinión, ¿qué es lo que tiene que cambiar para combatirlo eficazmente y recuperar verdadera credibilidad y confianza? ¿Qué medidas concretas y efectivas tienen que resultar de este encuentro?
Cardenal Ouellet: Es una gran pregunta. Ciertamente con las recientes noticias existe una conciencia creciente de la gravedad de este problema de abuso en la Iglesia. Obviamente, los informes cubren muchos años, y a veces tenemos la impresión que no se ha hecho nada recientemente cuando, en realidad, se ha hecho mucho recientemente para combatir eso. Pero creo que algo más se debe hacer dentro de la Iglesia, en la formación de sacerdotes y, sin duda, aplicar mayor prudencia en la selección de obispos. Yo diría que necesitariamos la participación de más mujeres en la formación de sacerdotes para enseñar, para discernir, y para el discernimiento de candidatos para el equilibrio de la efectividad. Pienso que necesitamos mas reflexión aquí. El Papa ha llamado a Roma a todos los presidentes de las Conferencias Episcopales para tratar este problema en una amplia perspectiva. Parece, en este momento, un problema americano o anglosajón, pero es un problema humano. Es universal. La Iglesia está en el centro de atención en este momento, pero el problema es más amplio que la Iglesia. Espero que el esfuerzo que está haciendo el clero para tratar este problema ayude a tratar los problemas que existen en la sociedad.
ZENIT (Deborah Castellano Lubov): Eminencia, ¿existe algo, tal vez en la selección o vigilancia de obispos, que le parezca que deba mejorar? ¿Algun área que podría ser deébil y que es necessario mejorar?
Cardenal Ouellet: En lo que se refiere a vigilancia, come usted sabe, existe un Motu Propriodel Papa Francisco: Como una Madre amorosa. Así que debemos afrontar el problema del mal gobierno de obispos sobre estas cuestiones. Esto es algo que ya se ha implementado; estamos al comienzo de esta implementación. Así que tenemos que tener algún tipo de criterio. También tenemos que coordinar entre los diferentes dicasterios de la Santa Sede para asegurar que nosotros, entre las Iglesias Orientales, la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, la Congregación de Obispos y el Secretariado de Estado, etc, trabajemos en la misma dirección con los mismos parametros, para aplicar esto y ser efectivos. Pero creo que aceleraremos ahora, con los eventos recientes, aceleraremos y esperamos desarrollar algo más efectivo.
RADIO VATICANO (Alessandro Gisotti): Como Prefecto de la Congregación para los Obispos del Vaticano y como pastor, ¿qué le diría a los muchos fieles que se sienten traicionados — mucha gente se siente traicionada, triste y enfadada por estos escándalos?
Cardenal Ouellet: Los fieles ven que sus pastores necesitan oraciones y necesitan ser respaldados y alentados. En tiempos recientes han sido atacados fuertemente. Debe haber solidaridad dentro de la Iglesia, pero también es necesario que la gente exprese su enfado, su insatisfacción, su frustración, en total libertad. Este es el camino para tratar estos problemas. Yo creo que los pastores no solo deben escuchar, sino también invitar la gente que ha sufrido a manifestarse, porque si estas heridas no se expresan, destruirán la vida de la gente. Hemos visto el sufrimiento y las consecuencias del abuso en los años recientes y que el daño es enorme y duradero en la vida. Hay un trabajo de reparación, de reconciliación que debe hacerse.
EWTN (Andrea Gagliarducci): Hasta ahora hemos estado hablando de abuso. El Papa ha llamado a los obispos del mundo a reunirse juntos para hablar de esto en febrero. Como Prefecto de la Congregación para los Obipos, ¿qué le gustaría decir usted a los obispos del mundo?
Cardenal Ouellet: Estamos afrontando una crisis en la vida de la Iglesia, una crisis a nivel de liderazgo, de obispos, y también un cierto grado de rebelión. Esta es una cosa muy seria que se debe tratar de manera muy seria, y no solo de manera política. Así que yo pienso, por ejemplo, cuando existe un ataque directo contra el Santo Padre, creo que es un ejemplo muy malo y una ofensa muy seria. Y no creo que esté respondiendo positivamente porque también es un ataque injusto recientemente. Fue parte de mi mensaje, a los obispos de CCEE, expresar solidaridad con el Santo Padre. Es una condición sine qua non de solidaridad entre nosotros como obispos para llevar adelante la misión de la Iglesia, y me complace reconocer que hay algo que está siendo preparado por parte de este cuerpo, de la Conferencia Episcopal, para expresar al Santo Padre su solidaridad en este contexto actual.
Deborah Castellano Lubov
Traducción de Virginia Forrester
Imagen: Cardenal Ouellet
(Foto De Alessandro Gisotti)