Unos 30 misioneros y responsables de proyectos de Manos Unidas recorren la geografía española para involucrar a la ciudadanía en la lucha contra el hambre. De forma simultánea, la organización espera reclutar a un ejército de voluntarios digitales para llevar esta campaña a las redes sociales
Manos Unidas cierra en 2018 un ciclo de tres años centrados en dar respuesta a las causas y problemas que provocan el hambre en el mundo y reclamando: mayor acceso a los alimentos, una producción más sostenible y propuestas contra la pérdida y el desperdicio de alimentos.
Desde el 29 de enero y hasta el domingo 11 de febrero, día en el que se celebrará su Jornada Nacional, Manos Unidas presenta la campaña Comparte lo que importa a través de numerosos eventos en toda España. Con ella concluirá el Trienio de Lucha contra el Hambre (2016-2018) en el que Manos Unidas está trabajando para dar respuesta a las causas y problemas que provocan el hambre en el mundo.
Solucionar la lacra del hambre, dice Manos Unidas, «pasa por acompañar a los más pobres, reforzar el derecho a la alimentación de los pequeños productores, contribuir al cambio hacia unos sistemas alimentarios más justos y educar para una vida solidaria y sostenible».
«Con este objetivo –añade la nota de la ONG para el desarrollo de la Iglesia–, en 2018, nuestro trabajo se centrará en tres cuestiones esenciales y urgentes que nos pueden ayudar a acabar con la pobreza y el hambre en el mundo: favorecer iniciativas que permitan el acceso a los alimentos para consumo humano, y no para el beneficio económico; impulsar sistemas de producción medioambientalmente sostenibles y plantear propuestas que eviten la pérdida y el desperdicio de alimentos».
Hasta el 11 de febrero, cerca de 30 misioneros y responsables de proyectos de desarrollo que trabajan con Manos Unidas en algunos de los países más pobres del planeta, recorrerán más de 53 ciudades españolas compartiendo sus testimonios.
Simultáneamente, la organización busca generar impacto en la opinión pública involucrando a la propia ciudadanía en la campaña a través de las redes sociales. El objetivo es reclutar un ejército de voluntarios digitales que «compartan» contenidos que «muestren la realidad en la que viven cientos de miles de millones de personas en un mundo en el que, en el último año, se ha incrementado en un 11% el número de personas hambrientas y pide a la sociedad que se sume a la lucha contra el hambre, la pobreza y contra las estructuras injustas que perpetúan esta situación» El hashtag es #ComparteLoQueImporta.
Manos Unidas ha elegido como imagen de su nueva campaña la transformación de un móvil en una regadera: «un símbolo que la organización utiliza para que veamos que lo que compartimos [en las redes] tiene resultados» en las vidas de los demás.
815 millones de personas, recuerda la organización, pasan hambre en el mundo; la desnutrición cónica infantil afecta a 155 millones de niños menores de 5 años y 15,3 millones de personas fueron desplazadas debido a las crisis alimentarias que desencadenaron los conflictos.
Para presentar la Campaña y poder contar no sólo cifras sino ejemplos concretos de ese compartir, Manos Unidas contará con Marta Machain, directora de Proyectos de la Fundación Celestina Pérez de Almada de Paraguay y con Juan Pablo López Mendía, misionero español que ha pasado sus últimos 21 años en Benín.
Además de ellos, unos 30 misioneros y expertos en desarrollo y lucha contra la pobreza, recorrerán estos días más 53 ciudades españolas para compartir su experiencia de lucha contra el hambre a través de proyectos de desarrollo en algunos de los países más pobres del planeta.
Alfa y Omega
(Foto: REUTERS/Antony Njuguna)