El presidente de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos (USCCB), el cardenal Daniel N. DiNardo, emitió un comunicado en el que condenó lo sucedido y aseguró su «oraciones y las de mis hermanos obispos por las víctimas» y sus «familiares»
Al menos 26 personas han muerto en un tiroteo registrado este domingo 5 de noviembre en una iglesia baptista de la localidad de Sutherland Springs, en Texas.
El atacante entró en la iglesia y abrió fuego contra los presentes, que en ese momento se encontraban en una celebración religiosa. Posteriormente, el asesino intentó huir pero fue abatido.
Según medios locales, entre las víctimas podría haber varios niños, el menor de 5 años, y personas de hasta 72 años de edad.
Condena de los obispos de EE.UU
Al conocerse el suceso, el presidente de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos (USCCB) emitió un comunicado en el que condenó lo sucedido y aseguró su «oraciones y las de mis hermanos obispos por las víctimas» y sus «familiares». Concretamente, el cardenal DiNardo pidió «al Señor por la curación de los heridos, su cariño por los que murieron y el consuelo de sus familias».
Asimismo, el también arzobispo de Galveston-Houston mostró su cercanía con los bautistas y con toda la comunidad de Sutherland Springs. «Nos mantenemos en unidad con ustedes en este tiempo de terrible tragedia» acaecida «en terreno santo, terreno empañado hoy por la horrenda violencia», añadió.
En el comunicado, el presidente de la USCCB alertó a su vez sobre «un problema fundamental en nuestra sociedad. Una cultura de la vida no puede tolerar, y debe evitar, la violencia armada sin sentido en todas sus formas». En este sentido, el cardenal recordó que «este evento incomprensiblemente trágico se une a una lista cada vez mayor de tiroteos masivos, algunos de los cuales también fueron en las iglesias mientras las personas adoraban y oraban».
Antes de concluir, el cardenal DiNardo pidió que el «Señor, que es la paz, nos envíe su espíritu de caridad y no violencia para alimentar su paz entre todos nosotros».
No guerras, no violencia, no armas
Tras la tragedia, también se ha pronunciado el arzobispo de San Antonio (Texas), diócesis en la que se produjo el ataque, que ha utilizado Twitter para clamar repetidamente contra la violencia, la guerra, las armas, y por la paz.
«Gobernador, No guerra, No violencia, No armas. Ya es suficiente!!!!», dijo en la red social monseñor Gustavo García-Siller.
En otros de sus mensaje, el arzobispo pidió «oraciones por nuestros hermanos en la fe. La Iglesia bautista está profundamente dolorida».
José Calderero de Aldecoa @jcalderero
Imagen: Iglesia baptista de Sutherland Springs, Texas, el 5 de noviembre de 2017
(Foto: Nick Wagner/AMERICAN-STATESMAN via REUTERS)