El director de la Oficina de Cultura y Turismo, Jaime de los Santos, ha inaugurado hoy la exposición, que podrá visitarse hasta el 5 de noviembre.
Presenta diversos proyectos de la artista sobre la temática de la historia, el tiempo y la memoria.
Incluye piezas de gran formato, algunas de ellas inéditas.
La muestra se suma a la conmemoración del octogésimo aniversario del bombardeo de Guernica.
La Oficina de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid ha inaugurado la temporada expositiva de la Sala Alcalá 31 con la muestra ‘Manchas en el silencio’ de Cristina Lucas, una de las artistas actuales españolas con mayor proyección internacional.
El directo de la Oficina de Cultura y Turismo, Jaime de los Santos, ha sido el encargado de presentar esta exposición, comisariada por el crítico de arte Gerardo Mosquera, que tiene como ejes generales la historia, el tiempo y la memoria, materializados a través de instalaciones y vídeoproyecciones que ahondan en conceptos como el uso del arte como medio de investigación histórica, la poesía conceptual o la fascinación borgiana por el tiempo.
La pieza principal de la muestra es El rayo que no cesa, una vídeo-investigación-instalación en proceso de creación que construye un relato histórico de los ataques aéreos que han provocado víctimas civiles desde 1912 hasta la actualidad. Se compone de tres grandes proyecciones: una revela datos concretos, otra recoge la cartografía de las barbaries y la tercera presenta fotos documentales.
El rayo que no cesa se va construyendo desde la investigación, un proceso en el que han participado los asistentes al taller de Madrid 45 (Programa de artes visuales de la Comunidad de Madrid) que Cristina Lucas impartió el pasado abril, así como un grupo de estudiantes de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid. A esta investigación también pueden contribuir los visitantes de la exposición.
Además, esta pieza se entrelaza con otras en las que la historia y el tiempo están siempre presentes. La obra Tufting, derivada de la anterior y realizada ex profeso para la muestra, se compone de lienzos bordados que representan mapas que evidencian los puntos de violencia contra objetivos civiles; Piper Prometeo, un vídeo donde un avión hace volar la fórmula física que hizo posible la aviación; y Clockwise, una gran instalación con 360 relojes que acerca a los espectadores a una experiencia física del tiempo a partir del tic-tac de cada uno de ellos. De esta manera, el tiempo global puede ser contemplado simultáneamente, en una experiencia artística cercana a la teoría de la relatividad.
En definitiva, “Manchas en el silencio” es una exposición que evidencia el carácter comprometido de la producción artística de Cristina Lucas, así como el uso del arte como medio de investigación histórica. La muestra da testimonio de la memoria y la violencia en la historia pero, como señala Gerardo Mosquera, lo hace por una doble vía tanto intelectual como sensible, constituyendo una personal conmemoración de los 80 años de la tragedia de Guernica.
La exposición se acompaña de la publicación Wavelength / Longitud de onda, coproducida por la Comunidad de Madrid, el OK Center for Contemporary Art y el Mudam Luxenbourg, que recoge el trabajo de Cristina Lucas durante la última década. Incluye textos de la propia artista y de especialistas como Estrella de Diego, Chantal Pontbriand, Sergio Rubira o el comisario de la muestra, Gerardo Mosquera, entre otros.
De manera paralela, la exposición cuenta con un amplio programa educativo y cultural con diferentes actividades como visitas dinamizadas y talleres intergeneracionales para todos los públicos, visitas guiadas para grupos o los ya clásicos Encuentros en Alcalá 31, en los que el comisario, la propia artista y otros especialistas en la materia ofrecerán su particular punto de vista sobre la muestra.
Sobre Cristina Lucas
Cristina Lucas (Jaén, 1973) es una artista multidisciplinar cuya obra se plantea como un cuestionamiento de lo establecido en el que lo político y lo estético tienen un doble valor, tanto artístico como de denuncia. Trabaja muy diversos medios, desde la performance hasta el vídeo, la fotografía o la instalación.
Ha expuesto en museos como el CA2M Centro de Arte Dos de Mayo, el MUDAM de Luxemburgo o el OK Center for Contemporary Art de Linz y su obra está presente en colecciones como la del Centro Pompidou de París o el Kiasma de Helsinki. Además, ha recibido el Premio de Cultura Comunidad de Madrid en 2017 en la categoría de Artes plásticas.