La Consejería de Sanidad ha activado esta semana, y por décimo año consecutivo, el Plan de Vigilancia y Control de los efectos de las Olas de Calor 2014, dirigido a prevenir los problemas de salud que pueden causar las altas temperaturas, y que se mantendrá operativo hasta el 15 de septiembre.
“El Plan cuenta con diversos canales para informar a los profesionales sanitarios, a los servicios sociales y a la población en general interesada, con objeto de que los madrileños estén prevenidos y adopten, en su caso medidas de precaución ante la subida de las temperaturas”, indicó el director general de Ordenación e Inspección, Manuel Molina.
Por segunda vez, el Plan incluye la posibilidad de recibir a través de mensajes SMS información cuando se produzcan alertas de calor. Los interesados se pueden suscribir a este servicio gratuito a través de www.madrid.org/calorysalud al igual que a la recepción de información a través de correos electrónicos.
En la página web, la Consejería de Sanidad incluye, de lunes a viernes, un Boletín de Temperaturas que informa mediante iconos en forma de sol del nivel de riesgo junto con la predicción de la situación de calor de los cinco días siguientes.
Durante el pasado año, Sanidad envío 12.835 mensajes a móviles alertando de altas temperaturas y 39.880 correos electrónicos informativos, un 53 % más que en 2012.
Además, la Consejería de Sanidad pone en marcha una campaña informativa a través de la difusión de 3.000 carteles y 50.000 folletos con consejos para afrontar las altas temperaturas, y que se distribuirán en los centros de salud, consultorios locales y residencias de ancianos, a través del Servicio Regional de Bienestar Social.
El Plan de prevención se dirige a la población más vulnerable a los efectos que causan las altas temperaturas: ancianos y personas con enfermedades cardiovasculares o respiratorias. En este grupo se incluye a los mayores de 80 años, ancianos que viven solos, con escaso apoyo sociofamiliar, enfermos o con situación socio-económica desfavorecida. También por su vulnerabilidad, se dirige a la protección de los menores.
Niveles de riesgo
El Área de Vigilancia de Riesgos Ambientales en Salud, perteneciente a la Dirección General de Ordenación e Inspección de la Consejería de Sanidad, es la unidad responsable de determinar los niveles de normalidad o alerta por calor extremo y de la difusión de la información al ciudadano. A la vez, la Dirección General de Atención Primaria se encarga de notificar los casos de alerta a la red socio-sanitaria.
En función de los informes epidemiológicos, se han establecido tres niveles de riesgo, que son la clave para determinar el nivel de intervención.
El nivel 0, representado por un sol verde, indica una situación de ausencia de riesgo al encontrarse las temperaturas dentro del rango de la normalidad en la época estival. No se requiere ninguna intervención especial, salvo trasladar a la población información general sobre los riesgos de las altas temperaturas y recomendaciones para proteger la salud frente al sol y el calor.
El nivel 1, representado por un sol amarillo que indica Precaución, se establece cuando las temperaturas máximas previstas, bien para el día en curso o cualquiera de los 4 días siguientes, es igual o superior a 36,6 ºC, siempre que no se supere dicha temperatura más de tres días consecutivos. Se activa la alerta I, Precaución, con la comunicación correspondiente a la Red de Asistencia Sanitaria y a las diferentes instituciones responsables de la intervención (servicios sociales, ayuntamientos, etc.).
El nivel 2, representado por un sol rojo, indica Alto Riesgo. En este caso las temperaturas máximas previstas para el día en curso o cualquiera de los 4 días siguientes son iguales o superiores a 38,6 ºC, o bien son iguales o superiores a 36,6 ºC durante 4 días consecutivos. Se activa la alerta II, Alto riesgo, comunicando la situación a la Red de Asistencia Sanitaria y a las diferentes instituciones con competencia en Servicios Sociales. Además de la información, se hace precisa en este nivel de alerta la intervención directa sobre la población vulnerable.
Consejo para hacer frente a las altas temperaturas
La exposición a elevadas temperaturas puede provocar diversos efectos directos en el organismo, como pueden ser entre otros, estrés, agotamiento con síntomas tales como debilidad, mal estado general, ansiedad, vértigo, mareos y dolor de cabeza, o el denominado “golpe de calor” que se presenta con temperaturas corporales por encima de los 40º C y con disfunciones del sistema nervioso central que pueden revestir diversa gravedad.
Los profesionales sanitarios recomiendan consumir al menos diariamente dos litros de agua y líquidos, en forma de zumos si es posible para evitar la deshidratación y protegerse del sol en las horas de máxima insolación.
Se deben evitar los paseos y el ejercicio físico en las horas de más calor (especialmente entre las 12 y las 17 horas) y procurar que las prendas de vestir sean de tejidos naturales, ligeros y de colores claros.
Asimismo, aconsejan que se llame al 112 en caso de exposición intensa al calor con cuadro con fiebre alta, piel caliente, enrojecida y seca, ya que puede presentar un cuadro de golpe de calor y requiere una atención urgente.
Por otra parte, las personas con enfermedades cardiacas, pulmonares o endocrinas deben mantenerse bien hidratados y cuidar su tratamiento farmacológico.