400.000 personas pueden morir de hambre en Nigeria si no se logran fondos de manera urgente. Tres ONG reclaman atención ante una las mayores crisis humanas de nuestros días.
La crisis humanitaria consecuencia del conflicto con Boko Haram alcanza ya a 20 millones de personas en cuatro países ante la indiferencia y el desconocimiento de la comunidad internacional, según han denunciado Acción contra el Hambre, Oxfam Intermón y Save the Children, tres organizaciones presentes en la región. El número equivale a la mitad de la población española.
En Nigeria, Níger, Chad y Camerún, en la región conocida como cuenca del Lago Chad, hay más de 7 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria tras ocho años de un conflicto que deja 2,6 millones de desplazados por el conflicto con Boko Haram y las operaciones militares contra ese grupo. Tan solo en Nigeria hay 540.000 niños desnutridos que requieren ayuda inmediata para sobrevivir, y 400.000 personas que pueden estar ya técnicamente en situación de hambruna. Nigeria, junto a Somalia y Yemen, es uno de los tres países del mundo bajo amenaza de hambruna, que ya ha sido declarada en Sudán del Sur.
Según las organizaciones, hace falta una movilización urgente de gobiernos y donantes para salvar millones de vidas amenazadas por una crisis invisible pero de proporciones gigantescas, de la que el secuestro de las 200 estudiantes de Chibok es solo la punta del iceberg. El llamamiento humanitario de las Naciones Unidas para atender esta crisis en 2017 asciende a 1.500 millones de dólares, más del doble que en 2016. En la conferencia de donantes celebrada en Oslo el pasado 24 de febrero se comprometió solo el 33% de los fondos necesarios.
«2017 ha comenzado con cuatro grandes crisis alimentarias sobre el tablero internacional: cuatro países al borde la hambruna, con la mano del hombre como denominador común en todas ellas», declara Olivier Longué, director general de Acción contra el Hambre. «En Nigeria y la región 20 millones están siendo doblemente rehenes de la violencia: ambas partes del conflicto están utilizando el hambre como un arma de guerra, poniendo directamente en riesgo la vida de 540.000 niños».
«La población sufre abusos de derechos humanos a niveles horrendos, incluyendo violencia sexual, secuestros, asesinatos, torturas, reclutamiento forzoso, desaparición o detención arbitraria», explica Jose María Vera, director general de Oxfam Intermón. «El conflicto y las operaciones militares implican que tierras, ríos y lagos que son el sustento de la población resultan inaccesibles. Los mercados han cerrado y medios de transporte como las motocicletas han sido prohibidos, privando a la gente de sus medios de vida».
Por su parte Andrés Conde, director general de Save the Children, alerta: «Los niños son los más vulnerables en las emergencias humanitarias. La violencia en esta zona ha obligado a más de un millón de menores a huir de sus casas y a abandonar la escuela. Muchos de ellos han sido víctimas de ataques y han visto cómo amigos y familiares han sido asesinados frente a ellos. La comunidad internacional no puede seguir impasible ante el sufrimiento de tantos niños y sus familias en una de las crisis humanitarias más importantes del continente africano».
La respuesta a todas estas necesidades es sumamente difícil debido a que el conflicto continúa y los niveles de violencia son muy elevados. Se registran niveles alarmantes de violaciones de derechos humanos, incluyendo reclutamiento forzoso de menores y violencia sexual. Acción contra el Hambre, Oxfam Intermón y Save the Children se han unido para informar conjuntamente de la verdadera dimensión de esta crisis, apelar a instituciones y particulares a aportar fondos para atender la emergencia humanitaria y movilizar a la comunidad internacional para buscar una solución de fondo al conflicto, más allá de la respuesta militar.
En 2016, España aportó poco más de tres millones de euros a esta crisis, lo que supuso menos del 2% del llamamiento internacional de Naciones Unidas. Dado que aún no se han aprobado los Presupuestos Generales del Estado para 2017, sigue siendo un interrogante cuánto será el monto de ayuda humanitaria y concretamente la contribución española a esta crisis. El drástico incremento de las necesidades en esta crisis exige una respuesta más generosa por parte de la cooperación española.
Acción contra el Hambre
Foto: Guy Calaf